Podrían introducirse cambios legales "simbólicos", según fuentes parlamentarias
BARCELONA, 6 (EUROPA PRESS)
Una reforma sustancial de la Ley de la Presidencia de la Generalitat para investir a Carles Puigdemont (JxCat) chocaría con la doctrina del Tribunal Constitucional (TC) y del Consell de Garanties Estatutàries (CGE), y con el artículo 155 de la Constitución, según fuentes parlamentarias consultadas por Europa Press.
Estas fuentes han indicado que la Ley de Presidencia es una norma fundamental de despliegue del autogobierno y que cambiarla requiere un amplio consenso de al manos 90 avales en el Parlament.
JxCat explora un cambio de esta ley en uno de estos dos sentidos: permitir la investidura de Puigdemont a distancia, o diseñar la posibilidad de tener un doble Govern --uno capitaneado por Puigdemont en Bélgica y otro efectivo en Cataluña--.
En ambos casos sería de una reforma de calado, pero, además, los tres partidos independentistas suman 70 diputados, lejos de la mayoría cualificada de 90 que necesita un cambio así.
Las mismas fuentes consultadas esgrimen que la única vía del independentismo para una iniciativa así sin chocar con el TC sería intentar introducir cambios en esta ley siempre que fueran "simbólicos".
Por ejemplo, podrían crear un consejo asesor que diera cobertura a los exmiembros del Govern que están en Bélgica, mientras en Cataluña investirían a otro candidato que no fuera Puigdemont siguiendo al detalle la interlocutoria del TC.
REFORMA EXPRÉS
Los grupos independentistas podrían intentar la reforma utilizando la lectura única, un procedimiento de máxima urgencia que tanto el TC como el CGE han avalado pero con limitaciones: usarlo solo en casos que se caractericen por su simplicidad y por generar un amplio consenso, y que los grupos puedan presentar enmiendas y pedir dictamen al CGE.
Las fuentes consultadas afirman que reformar la Ley de Presidencia como quiere JxCat no es superficial, por lo que no cumpliría los requisitos que pide el TC para el procedimiento de lectura única.
En cambio, sí podría usarse esta vía si se proponen cambios "simbólicos, que no alteren la arquitectura" de las instituciones de autogobierno reguladas por el Estatut.
Así, los independentistas podrían llegar a reformar esta ley sorteando al TC siempre que limiten los cambios a conceptos "simbólicos" para desencallar la investidura de Puigdemont.
El procedimiento sería rápido y simple: registrar una proposición de ley, y elevarla al pleno desde la Mesa --con mayoría de JxCat y ERC--, abriendo antes un plazo para presentar enmiendas.
Una vez en el pleno, los grupos podrían pedir aprobar la iniciativa mediante el procedimiento de lectura única y dar luz verde a la modificación.
LECTURA ÚNICA
El reglamento del Parlament recoge el uso de la lectura única desde que los grupos independentistas lo introdujeron en la anterior legislatura, cuando contemplaron aprobar las leyes de 'desconexión' con este sistema.
Finalmente la lectura única no se llegó a utilizar, después de que el TC la limitara a casos de poco calado, y los independentistas optaron por introducir la votación de estas leyes mediante el artículo 81.3 del reglamento del Parlament, que permite introducir votaciones a última hora si lo pide la mayoría del pleno.