BARCELONA, 12 Jun. (EUROPA PRESS) - Los Mossos d'Esquadra han detenido a 27 ladrones especialistas en robos de relojes de lujo que principalmente actuaban contra turistas en zonas frecuentadas por personas de alto poder adquisitivo en Barcelona, y que juntos acumulan más de 250 antecedentes policiales. En rueda de prensa, el inspector jefe de área de investigación criminal de Barcelona, Pere Guillén, ha explicado que el valor total de los relojes sustraídos por estos delincuentes asciende a 312.000 euros --podían costar desde 500 a 120.000 euros--, y se revendían en el mercado negro en países de Oriente Medio y el norte del Magreb. Las piezas robadas eran de las marcas Richard Mille, Audemars Piguet, Patek Philippe, Hublot, Rolex, Hermès, Cartier, Panerai Luminor y Ulysse Nardin, y ninguno de ellos ha podido ser recuperado por la rapidez en revenderlos de los receptadores, que no han podido ser detenidos en el operativo. El grup de Multireincidents de BCN fa 27 detinguts x robar rellotges de luxe. Se'ls atribueix 20 robatoris i un botí total de 312.000€ pic.twitter.com/NBk4N4GtiM Los ladrones localizaban a sus víctimas a las puertas de restaurantes prestigiosos, hoteles de categorías superiores, joyerías de lujo y discotecas, principalmente en los distritos de Ciutat Vella y Eixample, y hacían seguimientos en busca de la oportunidad para abordarles. Una vez seleccionado el objetivo, se acercaban a la víctima con cualquier pretexto y le quitaban el reloj con mucha habilidad, con maniobras de distracción, sin que se diera cuenta, usando una técnica de un movimiento de muñeca. En caso de ser descubiertos, estos delincuentes no dudaban en usar la violencia para conseguir el botín, por lo que se les atribuyen delitos de hurto y de robo violento, aunque según el inspector, usaban solo "la fuerza mínima indispensable" y en ningún caso causaron lesiones leves a las víctimas. 20 ROBOS Los detenidos, a quienes les atribuyen en total 20 robos, son de nacionalidad francesa y belga, viven en ciudades como París y Londres, y, tras pasar a disposición judicial, 14 han ingresado en prisión provisional. Son personas con una gran movilidad, que pasan pocos días en la ciudad y se marchan rápidamente tras un golpe, llevan un alto nivel de vida, visten bien, viajan en avión y muchos son originarios de Argelia. La investigación del Grupo de Multirreincidentes de los Mossos, bautizada Raqib, empezó en octubre de 2016 al detectar un repunte de este tipo de robos, y desde entonces se ha ido arrestando a estos 27 ladrones, algunos de ellos 'in fraganti'. El inspector ha constatado que los ladrones buscan principalmente a turistas como víctimas porque saben que en muchas ocasiones no tiran adelante con la denuncia o no se presentan en el juicio, por lo que los delitos pueden quedar impunes. Ha destacado que, para evitar este efecto de impunidad, los Mossos realizan las diligencias lo más rápido posible cuando el turista está todavía en la ciudad, como las ruedas de reconocimiento, y se hacen pruebas preconstituidas --que ya sirven para el día del juicio sin la necesidad de la presencia de la víctima--. Así, ha dicho que, desde que empezó esta investigación --cuya primera fase ha culminado pero sigue en marcha--, este tipo de robos ha bajado pero "no se ha acabado el problema". "PROBLEMÁTICA GLOBAL" Además, ha avisado de que esta tipología delictiva es una "problemática global" en la mayoría de países de la UE, y ha destacado la importancia de la colaboración con países como Francia y Reino Unido, de donde eran estos ladrones y acumulan numerosos antecedentes. Respecto a los receptadores que se dedican a revender estos relojes, ha explicado que son personas que obtienen importantes ganancias, con mucha movilidad, y que, por contra, sus acciones delictivas conllevan penas muy bajas, de solo dos años de cárcel, pese a que son una pieza indispensable del engranaje para este negocio ilícito, por lo que ha pedido hacer una reflexión.