Reitera que si gobernara llegaría "hasta el final" en defensa de la inmersión
BARCELONA, 29 Mar. (EUROPA PRESS) -
El expresidente de la Generalitat Quim Torra ha considerado este martes que su antecesor en el cargo, Carles Puigdemont, podría haber ido "más lejos" tras el referéndum del 1-O de 2017, y que fue una responsabilidad compartida no haber avanzado hacia la independencia.
"A Puigdemont la historia le ha dado unas cartas formidables. Costará mucho repetir el 1-O. Hay que volverlo a crear. A veces he pensado que con las cartas que tuvo Puigdemont podríamos haber ido más lejos", ha destacado en una entrevista en Catalunya Rdio recogida por Europa Press.
Según Torra, los ciudadanos independentistas esperaban que en otoño de 2017 se declarara la independencia: "Y acabamos chutando, pero de aquella manera. Y cuando lo repetimos nos falta la defensa de la república proclamada, que se llame a la ciudadanía a defenderla", ha añadido.
Al preguntársele si se tenía que defender la independencia pasara lo que pasara, el expresidente catalán ha apuntado que "la represión es un problema de los represores, no del represaliado".
También ha reiterado su propuesta de celebrar un nuevo referéndum en Catalunya y hacerlo coincidir con el que celebre Escocia en 2023 como posible hoja de ruta independentista, teniendo en cuenta "hasta los que confían en la mesa de diálogo saben que no llevará a ningún sitio y que fracasará".
MESA DE DIÁLOGO
Pese a recordar que como presidente participó en la primera reunión de la mesa de diálogo, ha querido diferenciarla de la otra do que se celebró en septiembre porque, a su juicio, él estaba en "confrontación" con el Gobierno.
"Para mí el Gobierno y el PSC es mi adversario. Es diferente ir a una mesa en la que los gobiernos están enfrentados a ir una mesa en la que ERC ha votado a Pedro Sánchez, los Presupuestos del Gobierno y mantiene la estabilidad del Gobierno", ha señalado.
El expresidente catalán también ha reiterado que los partidos independentistas están más pendientes de ganar las próximas elecciones que de la independencia, y cree que con ello se hace "un mal servicio" a los ciudadanos.
Además, ha advertido de que las facturas de un proceso independentistas pueden alargarse en el tiempo y que si un político independentista quiere cumplir su programa "no acabará bien porque chocará con el Estado del que te quieres separar".
CATALÁN
Torra, que es uno de los 90 firmantes contra el pacto de ERC, PSC y comuns para reformar la política lingüística, ha defendido de nuevo que si gobernara llegaría "hasta el final con una orden que estableciera seguir con la inmersión" y que la decisión tendría que asumirla el responsable político del ramo.
En su opinión, en aras del consenso se ha acabado comprando las tesis de los socialistas y de los comuns: "No había visto en ningún texto que se permitiera y se explicitara que la lengua castellana también sería una de las lenguas que se usarían en las escuelas".
Para Torra, los partidos independentistas deben explicar abiertamente que su voluntad es adaptar la política lingüística a la sentencia judicial y no decir que con ello blindan el catalán porque, a su juicio, no es cierto.