El Govern aprueba un decreto para gestionar los excrementos de las explotaciones ganaderas
MANRESA (BARCELONA), 3 (EUROPA PRESS)
Un total de 66 municipios de Catalunya no podrán ampliar sus granjas ni adquirir más ganado durante los próximos dos años, según fija el decreto aprobado este miércoles por el Govern en Consell Executiu.
La norma quiere aprovechar los excrementos del ganado en la fertilización del suelo y garantizar la calidad de la tierra y las aguas subterráneas en Catalunya con el control de los residuos que se generan en las explotaciones ganaderas.
Los municipios afectados por la norma son aquellos que registran un Índice de Carga Ganadera (ICR) superior al 1,2 y se encuentran en su mayoría en las comarcas de Osona, Bergued, Valls Oriental (Barcelona), Pla d'Urgell (Lleida) y Pla de L'Estany (Girona).
Esta "moratoria absoluta" para aumentar la capacidad ganadera también afecta a municipios de las comarcas de Alt Empord (Girona), Bages (Barcelona) y Segri (Lleida), y la vigencia se aplicará a partir de la publicación del decreto.
La norma está firmada por la Conselleria de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación de la Generalitat; la de Territorio y Sostenibilidad, y la de Salud, y su despliegue implica una inversión de 800.000 euros para la administración.
El sector, que ha participado en el desarrollo de la nueva norma, tendrá que invertir en nueva maquinaria y procesos de tratamiento de las deyecciones de las explotaciones ganaderas --concepto que engloba a purines, estiércol, gallinazas, entre otros excrementos--.
EXCREMENTOS GANADEROS COMO "RECURSO"
La Conselleria de Agricultora quiere con este decreto que las deyecciones ganaderas sean tratadas como un "recurso" en el proceso productivo y potenciar así la bioeconomía circular, además de evitar una mayor contaminación del suelo y reducirla con el control de los estiércoles y purines generados por las explotaciones, y el nitrógeno que desprenden.
La norma contempla como líneas de actuación la mejora en origen de la gestión de los excrementos, la innovación y perfeccionamiento en la aplicación de los abonos en el suelo, y el control y seguimiento de estos procesos.
(HABRÁ AMPLIACIÓN)