Lamenta que se hayan "cargado de malas maneras" el acuerdo con ERC para gobernar
BARCELONA, 18 (EUROPA PRESS)
El líder de Trias per Barcelona en el Ayuntamiento de la capital catalana, Xavier Trias, ha asegurado que el nuevo alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, le propuso repartirse la alcaldía dos años cada uno, y que él lo rechazó: "Y le dije que de ninguna manera".
Lo ha anunciado este domingo en el Consell Nacional que celebra Junts en el Auditori Axa de Barcelona, el día después de la investidura del candidato del PSC, Jaume Collboni, como alcalde de Barcelona.
Los votos de los comuns y del PP hicieron que Collboni arrebatara el liderazgo del Ayuntamiento a Trias, que fue el ganador de la elecciones municipales del 28M con 12 concejales, hecho que Trias ha considerado que les dio la razón y por lo que ha señalado que "con según quien no puedes ir".
Ha explicado que Collboni le dijo que le avisaría si iba a arrebatarle la alcaldía, pero que esto nunca sucedió: "Aún espero esa llamada".
Según él, le han quitado la alcaldía porque "no soportan que en Barcelona haya un alcalde al que llaman independentista" y porque creen que una de sus obligaciones es echar a los partidos independentistas de todas las organizaciones de poder, ha dicho.
"CONFRONTACIÓN INTELIGENTE"
Trias ha explicado que cuando en el pleno de investidura de este sábado dijo 'que os den a todos', se refería a hacerlo desde una "confrontación inteligente".
Según él, entender que su partido debe ganar las elecciones generales no se hace "ni desde la rabia ni desde el rencor, se hace desde el aprecio al país, desde el aprecio a la gente".
Ha afirmado que desde su partido están dispuestos a buscar colaboraciones, pero no a que les maltraten y les hagan cada día un poco más dependientes, en sus palabras.
ACUERDO CON ERC: "SE LO HAN CARGADO DE MALAS MANERAS"
Trias ha lamentado que el acuerdo de gobierno alcanzado con ERC para liderar la ciudad no haya prosperado y ha afirmado que "era muy positivo para la ciudad pero no ha podido ser, se lo han cargado de malas maneras".
Y ha considerado que las relaciones con el líder de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona, Ernest Maragall, para alcanzar este acuerdo fueron "extraordinarias, incluso afectuosas".