MELILLA 18 May. (EUROPA PRESS) -
Las Fuerzas de Seguridad de Marruecos han descubierto 27 inmigrantes en el doble fondo de un camión de construcción en la frontera cuando pretendía pasar a Melilla por el puesto fronterizo de Beni-Enzar, según han informado este jueves a Europa Press fuentes policiales.
Los agentes de la Gendarmería marroquí, durante la inspección del camión que llevaba material para construcción en el momento que procedía a entrar en Melilla, halló un doble fondo construido de hormigón soportado por maderas, donde en su interior se encontraron hacinados 27 hombres de raza negra.
Las citadas fuentes han subrayado que se trata de una novedosa manera de intentar pasar porque hasta ahora los inmigrantes eran escondidos en dobles fondos del propio vehículo, en huecos naturales del mismo o prefabricados, pero en esta ocasión se ha elegido un cargamento de construcción para habilitar en su interior un doble fondo.
Los agentes detuvieron tanto al conductor como a los inmigrantes para ser puestos a disposición judicial, en un caso por tráfico de personas y en el caso de lo 27 subsaharianos por entrada irregular en Marruecos.
Por otro lado, los Bomberos han rescatado en Melilla a un joven argelino de 30 años de edad que quedó atrapado en un tubo que era cargado por un camión, por el que intentaba ir de polizón a la Península en uno de los barcos que enlazan la ciudad con los puertos de Andalucía.
Según ha explicado un portavoz de la Comandancia de la Guardia Civil, los hechos han ocurrido en el interior del Puerto de la Ciudad, Melilla, donde la Guardia Civil realiza control para evitar que persones indocumentadas accedan a los buques como polizones, ocultos en lugares muy peligrosos que ponen en riesgo su integridad física.
En esa difícil misión, el can del servicio cinológico de la Comandancia, llamado Tango, un teckel, pequeño de tamaño, pero de gran corazón, advirtió a su guía de la presencia de una persona oculta en peligro, "en el interior de un tubo de hierro, utilizado para prospecciones marinas", ubicado sobre una plataforma que en esos momentos embarcaba en un buque de carga con destino a la península.
El lugar donde se encontraba esta persona oculta, al fondo del interior del tubo, de unos 15 metros de largo, por 40 cms, de ancho, impedía extraerlo, por lo que se requirió la colaboración de los servicios Médicos del 061 y Bomberos.
El rescate ha durado una hora y media aproximadamente, y ha tenido un final feliz, tras introducirse un bombero en el tubo, "llegar hasta la persona aprisionada reptando, lazar a la persona con un cabo y tirar de él los compañeros desde el exterior", siendo ambos atendidos por los servicios médicos, una vez en finalizado el rescate.
El portavoz policial ha destacado que Tango, "ese can que a diario contribuye a localizar, auxiliar y rescatar a esas personas en situación tan dramática como la descrita y de muy difícil localización, ha permitido el auxilio y rescate de unas 1.700 personas en los ocho años que lleva trabajando como "Guardia Civil" benemérito, en Melilla".