CEUTA 12 Ago. (EUROPA PRESS) -
Las Fuerzas de Seguridad marroquíes han rechazado durante la madrugada de este sábado la entrada en Ceuta a nado, bordeando el espigón marítimo fronterizo del Tarajal, de alrededor de un centenar de inmigrantes indocumentados súbditos del Reino alauita que han intentado burlar la vigilancia de los agentes del país vecino y de la Guardia Civil en la zona, aprovechando la niebla que ha cubierto durante la noche el litoral de la ciudad autónoma.
Fuentes de la Comandancia local de la Benemérita han explicado en declaraciones a Europa Press que la Gendarmería marroquí ha contenido a "el 95%" de las personas que han intentado arrojarse al agua desde la costa más próxima a territorio español.
No obstante, el Instituto Armado ha mantenido movilizadas durante toda la noche unidades del Servicio Marítimo, los Grupos Especialistas en Actividades Subacuáticas (GEAS) y Patrullas de Costa.
Solamente una docena de inmigrantes ha logrado alcanzar el litoral de la ciudad autónoma, desde donde han sido trasladados de inmediato a la frontera para ser entregados a las autoridades del país vecino en aplicación de la figura del denominado 'retorno en frontera'.
En Ceuta solamente se han quedado tres menores migrantes no acompañados que serán acogidos en el Centro de Realojo Temporal de La Esperanza que gestiona la administración autonómica, en el que este viernes entró otra media docena de jóvenes que consiguió entrar irregularmente en la localidad española norteafricana.
La presión migratoria sobre la ciudad autónoma se está concentrando durante las últimas semanas en intentos de entrada por la vía marítima tanto a nado individualmente o en pequeños grupos como a bordo de motos acuáticas que, desde el país vecino y en incursiones exprés en aguas jurisdiccionales españolas, arrojan a los inmigrantes en las proximidades de la línea de costa de Ceuta antes de retornar al espacio marítimo bajo soberanía del Reino alauita.
Para intentar combatir esa última forma de proceder el Ministerio del Interior envió a mediados de julio a Ceuta una dotación extraordinaria de 18 efectivos de los GRS, la unidad de élite de la Benemérita, y el pasado sábado entraron en vigor unas nuevas Instrucciones de la Capitanía Marítima local que prohíben expresamente a las motos acuáticas salir de aguas españolas y alejarse más de dos millas de tierra, así como navegar de noche o en condiciones de mala visibilidad.