MELILLA 15 May. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de Marruecos han accedido a abrir un "pasillo humanitario" para permitir el regreso de parte de sus nacionales atrapados en Melilla, unos 320, entre el viernes y sábado.
La Delegación del Gobierno en Melilla ha informado de que en la tarde de este viernes el Gobierno marroquí ha comunicado su decisión de repatriar a los nacionales y residentes marroquíes que se encontraban en tránsito en Melilla y que, debido al cierre de la frontera con motivo de la contención del Covid-19, se quedaron atrapados en la ciudad autónoma de Melilla.
El Gobierno marroquí ha facilitado un listado con los ciudadanos a repatriar, que ascienden a 200 personas. La medida se llevará a cabo este viernes a través de la frontera de Beni-Enzar.
La delegada del Gobierno, Sabrina Moh, está reunida con los máximos responsables de la Policía Nacional, de la Guardia Civil y autoridades sanitarias organizando la salida.
En la misma frontera, tal y como ha podido comprobar Europa Press, ya se concentra un número importante de personas esperando que se inicie el pasillo humanitario. La Policía Nacional, provisto con el listado de las primeras 200 personas que pasarán este viernes, está llamando uno a los que se ha aprobado pasar a Marruecos.
En este sentido, ha advertido de que solo dejarán pasar a Marruecos a las personas que integran las listas, realizadas por la Delegación del Gobierno y la Consejería de Política Social y aceptadas por Marruecos, aunque hasta la verja de la frontera se han acercado marroquíes que no han sido seleccionados y por tanto no podrán cruzar. Para el sábado, está previsto que otro grupo de 120 personas, también con una lista enviada por Marruecos.
Además de estos 320, que estaban acogidos en campamentos provisionales instalados en el la Plaza de Toros, el complejo V Pino y en el Cementerio Musulmán, se estima que en Melilla habrá otros 200 marroquíes en casas de familiares o en casas de alquiler, que también desean regresar a su país.
Varios autobuses esperan a los primeros 200 en el lado marroquí para recogerlos, así como un equipo de sanitarios para hacerles pruebas médicas, para saber si alguno está contagiado, antes de llevarlos para que sigan una cuarentena obligatoria de dos semanas.