CEUTA, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Ceuta ha dado este viernes a primera hora de la mañana por "perimetrado" el incendio forestal desatado alrededor de las 22,00 horas de este jueves, que ha calcinado "unas 100 hectáreas de terreno", un 5% de la superficie total de la ciudad según las estimaciones de los servicios de emergencias, lo que lo convierte en el de mayor extensión de la historia reciente de la localidad española norteafricana, por encima del que en agosto de 1993 arrasó 90 también en las colinas de García Aldave.
A primera hora de la mañana han desembarcado en Ceuta efectivos del Segundo Batallón de Intervención en Emergencias de la Unidad Militar de Emergencias (UME) procedentes de la Base de Morón para colaborar en las labores de extinción del fuego, que mantiene activos dos focos principales, en El Pinar, cerca del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), y en el mirador de Isabel II, en cuyas inmediaciones comenzaron las llamas.
La Ciudad Autónoma, la Delegación del Gobierno y la Comandancia General de Ceuta han movilizado durante toda la noche a unas 300 personas de todos sus servicios de emergencias, incluida de la plantilla del Cuerpo de Bomberos local al completo, para intentar frenar el acelerado avance del fuego gracias al viente de componente oeste, tarea a la que tras el amanecer se ha sumado un hidroavión FOCA-32.
Casi 60 personas han tenido que ser evacuadas de sus viviendas, aunque hasta el momento "no se han producido daños de consideración en ninguna vivienda". Tampoco se han debido lamentar daños personales.
El presidente de la Ciudad, Juan Vivas (PP), fuera de Ceuta por motivos personales, se encuentra "informado y en permanente contacto" con los servicios de emergencia implicados, a los que el Ejecutivo regional ha expresado su "profundo agradecimiento por el esfuerzo y la implicación demostrada".
Las llamas han calcinado sobre todo espacios con pino canario y alcornocales de alto valor ecológico, así como otros de matorral y zarzas. En su propagación, el incendio ha afectado al área catalogada como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) de Calamocarro-Benzú.