CEUTA, 2 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio Fiscal solicita una condena a tres años de cárcel para A.O., el padre del niño de ocho años de Costa de Marfil que fue rescatado por la Guardia Civil del interior de una maleta el 7 de mayo de 2015 en la frontera de Ceuta cuando una joven marroquí para la que se piden seis años de prisión pretendía introducirlo irregularmente en la ciudad autónoma en condiciones "inhumanas" y con "serio peligro" para la vida del pequeño.
Ambos están acusados de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros pero al progenitor se propone aplicarle la circunstancia atenuante mixta muy cualificada de parentesco, según han informado fuentes judiciales a Europa Press sobre la calificación de los hechos del Ministerio Público para la celebración de la vista oral en la Audiencia Provincial, juicio que todavía no tiene fecha señalada.
A.O. vivía cuando sucedieron los hechos en Puerto de Rosario (Las Palmas) con su esposa y una de sus hijas. Según las diligencias practicadas en fase de instrucción, en 2014 nació en él "la idea de obtener de las autoridades españoles la autorización de residencia por reagrupación familiar" para su hijo, Adou O., por lo que inició los correspondientes trámites administrativos.
Dicha petición le fue denegada el día 11 de noviembre de 2014 por resolución de la Subdelegación del Gobierno en Las Palmas. Entonces "decidió introducir ilegalmente a su hijo en territorio nacional" y para ello "se puso en contacto con un grupo de personas desconocidas que accedieron a realizar el pase ilegal del menor a cambio de 5.000 euros que el padre abonó".
Con el objeto de "garantizar el éxito de la operación", el acusado se dirigió hasta Casablanca (Marruecos), donde recogió a su hijo y posteriormente lo trasladó hasta Castillejos, la localidad marroquí ubicada al otro lado de la frontera ceutí del Tarajal, donde le esperaban "las personas que iban a realizar materialmente el pase por la frontera española".
Allí, siempre según el relato de la Fiscalía, "le informaron de las condiciones en las que se iba a realizar, que fueron aceptadas por el padre". El 7 de mayo de 2015 a las 11.55 horas, F.E.-Y., que entonces tenía 20 años y carecía de antecedentes penales, fue sorprendida por funcionarios de la Guardia Civil cuando pretendía acceder a territorio nacional "llevando oculto en el interior de una maleta de reducidas dimensiones al menor para introducirlo ilegalmente en la península cobrando parte de la cantidad inicialmente abonada por la operación".
La Fiscalía estima que "como consecuencia de la forma de ocultación, en una maleta muy pequeña, sin ventilación y con riesgo evidente de asfixia al estar el menor aglutinado de forma inhumana", se puso "en serio peligro" su vida. El progenitor del pequeño permaneció un mes en prisión provisional, desde el 8 de mayo hasta el 8 de junio de 2015, y la joven marroquí que llevaba a su hijo en la maleta sigue encarcelada desde entonces.