El PP ve que Hacienda de Melilla parece "haberse declarado en rebeldía" al no prorrogar el contrato del centro de MENA

MELILLA 3 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Partido Popular ha anunciado este viernes que la consejera de Hacienda de Melilla, Dunia Almansouri (CPM), incurrirá en un delito de prevaricación administrativa si no firma antes del 7 de enero la prórroga del contrato del centro de acogidas de menores extranjeros no acompañados (MENA) ya que la misma fue aprobada en comisión y la acusa "prácticamente de haberse declarado en rebeldía".

En rueda de prensa, el diputado popular y vicesecretario de Infraestructuras, Proyectos y Política Medioambiental, Manuel Ángel Quevedo, "en el conflicto del centro de menores de Purísima, es inaudito que una consejera de Hacienda se niegue a firmar la prórroga del contrato, aprobado en comisión de Bienestar Social" gracias a los votos del PSOE (gobierno) y PP (oposición) y en contra de CPM (gobierno) y Vox (oposición) y la abstención de Cs (que ostenta la Presidencia de la Ciudad Autónoma).

Para Quevedo, es una muestra más de la división existente en el Gobierno melillense, que conforman CPM, PSOE y Ciudadanos. A juicio del popular "el PSOE, nuevamente, vuelve a ser desautorizado por CPM, que se niega a continuar con su propuesta de prorrogar el contrato de explotación del centro de menores, con el fin de no dejar en el limbo a casi 200 trabajadores y la atención a 850 menores".

El dirigente del PP ha rechazado los argumentos que esgrimen los cepemistas para rechazar la prórroga del contrato a la empresa y asevera que "las instalaciones insuficientes no son competencia de la empresa, que debe, por imperativo asambleario, prorrogar su contrato".

El vicesecretario de Infraestructuras, Proyectos y Política Medioambiental ha afirmado que "no entendemos desde el PP que nadie del gobierno tenga que tratar este asunto con los sindicatos, en vez de con la empresa" y por ello señala que "el interés de CPM y de su presidente Mustafa Aberchán es, precisamente, controlar las empresas y a los trabajadores". "El PSOE no debería permitir estos desmanes, poniendo en riesgo a tantas familias trabajadoras y permitiendo que se ralle la ilegalidad" ha concluido Manuel Ángel Quevedo.