MELILLA, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha recuperado en Melilla numerosos objetos supuestamente procedentes de robos cometidos en la península tras el control de un cargamento de una tonelada que desembarcaba del barco de Almería; entre ellos, teléfonos móviles de última generación, tabletas, ordenadores, cámaras fotográficas, de video y numerosas herramientas.
Su portador, un marroquí de 27 años con residencia legal en Tarragona, ha pasado a disposición judicial como supuesto autor de un delito de receptación.
Según ha informado este domingo la Comandancia de la Guardia Civil en Melilla, el inicio de los hechos tuvo lugar en el puerto melillense el pasado día 24 de mayo, al realizar el Instituto Armado, en su faceta de Resguardo Fiscal del Estado, el control selectivo fiscal de las mercancías y pasajeros que en esos momentos llegaba vía marítima, en el buque correo procedente de Almería.
Su portavoz ha explicado que al realizarlo sobre una furgoneta ocupada tan solo por su conductor, que manifestó "no tener nada que declarar", los agentes se dispusieron controlar la carga que portaba con un peso aproximado de una tonelada.
De esta forma, entre multitud de herramientas y otros muchos efectos como material eléctrico o cableado, localizaron bolsas que contenían otros objetos de mayor interés y valor económico, como ordenadores, cámaras fotográficas, video, "tabletas", teléfonos móviles de última generación y otros, "sobre los que no aportó documentación ni facturas que acreditasen su legítima procedencia, interviniéndose los mismos al presuponerse que podrían ser de ilícita procedencia".
DENUNCIAS FALSAS DE ROBOS
El portavoz de la Comandancia de Melilla ha señalado que del análisis e investigación realizados en estos días para determinar la procedencia de estos objetos, han podido constatar sin género de dudas que uno de los teléfonos intervenidos, de los denominados de última generación, completamente nuevo, "empaquetado en su embalaje original", y precintado, "figura denunciado por su propietario ante los Mossos de Escuadra en Barcelona", como sustraído "mediante robo con violencia en la vía pública cuando lo estaba utilizando".
Sin embargo, la Guardia Civil ha asegurado que se trata de una denuncia falsa "porque el teléfono se encuentra en su embalaje original y sin utilizar".
Así, ha explicado que esta forma de proceder suele ser utilizada por personas o grupos organizados, que compran teléfonos en distintos establecimientos con seguros de garantía ante posibles robos o pérdidas y con posterioridad a la compra denuncian su sustracción para recuperar el valor del teléfono asegurado, teniendo el terminal en su poder.
TELÉFONOS DE 900 EUROS
En concreto, han sido seis los teléfonos intervenidos con su embalaje original, de una reconocida primera marca comercial y modelo que tan solo lleva un mes en el mercado, con un precio aproximado de unos 900 euros cada uno de ellos, "presumiéndose de todos ellos, al estar juntos, que su procedencia se atribuye al mismo procedimiento", ha detallado el portavoz policial.
De entre los objetos intervenidos, la Guardia Civil ha destacado del orden de 90 teléfonos móviles, 14 ordenadores y "tabletas", una cámara de video, dos de fotografía, más de 30 herramientas industriales, abundante material eléctrico y cableado. El valor de los objetos intervenidos y recuperados asciende a unos 15.000 euros.
Los objetos intervenidos son objeto de análisis y quedan a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Melilla, órgano judicial que entiende del caso.
El portador de la mercancía es un ciudadano de nacionalidad marroquí, que atiende a las iniciales M.G., de 27 años de edad, con residencia legal en España, en la provincia de Tarragona, que en calidad de detenido ha pasado a disposición judicial como supuesto autor de un delito de recepción con ánimo de lucro.
Según el portavoz de la Comandancia, "la pretensión del detenido era pasar con el vehículo a Marruecos, y caso de haberlo conseguido, se hubiese perdido definitivamente la pista de los objetos intervenidos".
La Guardia Civil ha destacado, por último, que continúa realizando gestiones con otros cuerpos policiales para poder determinar la procedencia y titularidad de los efectos aún no identificados.