Actualizado 10/01/2017 13:43

Vivas, partidario de "reflexionar" sobre el acceso sin visado a Ceuta de marroquíes

CEUTA 10 Ene. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Ejecutivo de Ceuta, Juan Vivas (PP), se ha mostrado partidario este martes de abrir un proceso de "reflexión" que involucre al Gobierno de España, al de Marruecos y a la Unión Europea sobre las condiciones de acceso a la ciudad autónoma de la población marroquí residente en la provincia de Tetuán debido a la "relación directa" que a su juicio existe entre la "atracción" de la localidad española y el incremento exponencial de los residentes en su entorno.

"Nadie ha planteado una propuesta concreta al respecto pero debe reflexionarse sobre la relación entre el atractivo de Ceuta y su frontera y el hecho de que la población de Tetuán haya pasado en pocos años de 300.000 a un millón de habitantes y la de Castillejos [la localidad del Reino alauita ubicada justo al otro lado del Tarajal], de 15.000 a 100.000", ha apuntado en declaraciones a los medios.

El objetivo de ese intercambio de opiniones debería ser, a su juicio, alcanzar un "acuerdo común" que involucre a ambos países y a la Unión Europea. En el Protocolo de Adhesión de España al Tratado de Schengen se acordó mantener un "régimen específico de exención de visado en materia de pequeño tráfico fronterizo entre Ceuta y Melilla y las provincias marroquíes de Tetuán y Nador".

El delegado del Gobierno en Ceuta, Nicolás Fernández Cucurull, se comprometió en octubre a que en cuanto dejase de estar en funciones el Ejecutivo de la Nación impulsaría una "negociación internacional" sobre tal excepcionalidad porque hoy "difícilmente puede ser aplicable" tras devenir en "una presión brutal en el número de personas y de vehículos que pretenden acceder diariamente a nuestra ciudad", 25.000 personas y 15.000 vehículos al día, según las últimas estimaciones.

Vivas también se ha mostrado confiado en que "durante el primer trimestre de este año" esté operativo, tras múltiples retrasos sin justificación concreta, el 'Tarajal II', el nuevo paso fronterizo reservado para el tránsito de los miles de porteadores marroquíes que sobreviven llevando sobre sus espaldas sin controles aduaneros todo tipo de productos adquiridos en Ceuta al país vecino.

Cuando entre en funcionamiento el Gobierno autonómico prevé instalar junto a sus puertas un puesto de control de Servicios Tributarios que vetará el paso en régimen de viajeros de cualquier bulto que exceda los 60 centímetros de lado, fardos que deberán ser considerados como expediciones comerciales, con lo que de hecho se imposibilitará su salida hacia el Reino alauita.

En paralelo se ha proyectado la habilitación de parcelas con sombras, fuentes y otros servicios para intentar erradicar la imagen "tercermundista" que dan de la ciudad "las avalanchas, los hacinamientos y ver a porteadores y porteadoras cargando con paquetes superiores a su tamaño o durmiendo bajo cartones en condiciones de precariedad". "Nadie puede estar de acuerdo con eso y queremos tanto que se respete la dignidad de esas personas como que no se produzca un impacto negativo sobre la imagen de Ceuta", ha resumido.