MADRID, 15 Oct. (CHANCE) -
Taylor Swift se ha convertido en la nueva protagonista de la edición australiana de VOGUE. La cantante posa ante el objetivo de Emma Summerton en una sesión de fotos donde el famoso Photoshop podría estar más que presente.
Bajo el estilimo de Christine Centera, la novia de Calvin Harris posa para este próximo mes de noviembre. Unas imágenes que han vuelto a levantar la polémica sobre el uso exagerado del retoque digital.
Desde que la actriz española Inma Cuesta alzase la voz contra la barita mágica del Photoshop, muchas son las voces que han comenzado a defender la naturalidad de la mujer.
Taylor no se ha pronunciado al respecto pero muchos son los que han acusado a VOGUE Australia de transformar por completo el rostro de la cantante que tantas pasiones levanta en el mundo entero pero que desea retirarse un tiempo.