MADRID, 17 Dic. (CHANCE) - Joaquín Sabina deshizo en el Barclaycard Center de las especulaciones desatadas tras su primer concierto que daba en solitario en Madrid en cinco años, y que tuvo que abandonar antes de los bises debido a un episodio de pánico escénico. El cantante logró superar el miedo escénico en su segundo concierto en la capital, ofreciendo un recital de dos horas y media de duración ante más de 10.000 seguidores. El cantante se dirigió a su público "desoyendo negros presagios lo que quisiéramos hoy es dar para ustedes que se lo merecen, el mejor concierto de nuestra vida". Pero no pudo evitar saludar con los ojos vidriosos y repitiendo traje verde, sabina tiró de poesía y de sus trucos para encandilar a sus fans. Entre el público estaban sus amigos, como Ana Belén y Víctor Manuel y los presentadores Jordi Évole y Manel Fuentes.