MADRID 2 Abr. (EUROPA PRESS) -
El cantante español Julio Iglesias reconoció en Pekín que no está "de moda", pero sostuvo que sigue siendo capaz de llenar las salas de espectáculos, tras recibir el trofeo Guinness de los Récords como el artista latino que más discos ha vendido en el mundo. Recibió el galardón de manos del prestigioso pianista chino Lang Lang. Con este premio inaugura su gira asiática.
El célebre cantante romántico partió nuevamente para realizar una gira mundial. En China, hará escala en Pekín, Shanghai y Shenzhen, donde ya le esperan millones de fans. Julio Iglesias, que ha vendido más de 300 millones de discos a lo largo de su carrera, es muy conocido en China e incluso ha cantado canciones en mandarín, pero descartó cantar en otros idiomas locales. El cantante confesó: "Me imaginaba a China como un gran país, lleno de sentimiento, y tenía razón". "No quiero que el pueblo de China me mate", bromeó.
"Quizás no esté 'de moda' en ningún país del mundo. No soy un artista 'in'. Pero he cantado toda mi vida", declaró el ídolo latino, de 69 años. "Una cosa es estar de moda y otra es ser popular", agregó Iglesias, después de haber recibido un trofeo del Guinness World of Records como el artista latino que más discos ha vendido.
"Tal vez en Inglaterra no canto ya ante 30.000 personas, como solía hacerlo hace 30 años, pero todavía puedo actuar en Inglaterra", dijo.
Sony, su casa discográfica, le entregó también una recompensa por ser "el primero y más popular de los artistas internacionales en China".
Julio Iglesias también sostuvo que estaría encantado de cantar en Corea del Norte, un país aislado cuya belicosa actitud preocupa actualmente a la comunidad internacional. "Si ellos me invitan, ¿por qué no? Yo no creo en las fronteras, ni en las razas ni en las nacionalidades", afirmó.
Julio Iglesias cantará en su gira también en Filipinas, Corea del Sur, Singapur y Taiwán.
El artista español ha grabado canciones en 12 idiomas y recibió el disco de Diamante del Libro Guinness en 1983 por haber vendido más de cien millones de discos en todo el mundo. En 1984 le colocaron una estrella en el camino de la fama, en Hollywood.