Carlos Falcó: "Para una velada romántica perfecta, elegiría un vino blanco fresco o un buen rosado"

Por Pilar Vilella

El empresario y bodeguero Carlos Falcó ha puesto en marcha un ambicioso proyecto llamado Iberwine, el único evento del mundo del vino con presencia internacional en Europa y América y que representa a la península Ibérica, y que se celebrará en Valladolid en el próximo mes de octubre. Carlos, un gran apasionado por la cultura del vino en todos sus aspectos, nos dio unos consejos para saber elegir un buen vino en la velada romántica perfecta, o bien tomando tapas con unos amigos. El marqués de Griñón, muy cercano y dispuesto a transmitir su pasión con el vino, mostró su preocupación por el poco aprecio de la gente joven hacia la cultura vinícola, ya que recientemente los datos de una encuesta han reflejado que esta generación lo considera una bebida de gente mayor.

-¿Qué es exactamente Iberwine?

-Es una feria especializada en vino y dirigida a los profesionales del sector. Hay muchas ferias de vinos, pero la inmensa mayoría son nacionales o locales. Las ferias más conocidas son Burdeos y la que se celebra en Verona. En España hay ferias con bastante solera, como la que se celebra en Barcelona en la feria de Alimentación. Lo que faltaba en España que es el tercer país productor de vino, era una Feria Internacional.

-¿Por qué hay que promover este tipo de eventos como Iberwine?

-Creo que en este mundo, lo que no se comunica, no existe. Este tipo de eventos son un lugar de encuentro para todos los profesionales del sector, no solamente para probar los vinos sino para hablar entre ellos. Probablemente, de ahí siempre sale algo interesante. Si a eso añadimos el arte y la sostenibilidad, tema clave en el siglo XXI, creo que tenemos un tipo de evento que va a ser un éxito seguro.

-¿Qué características tiene que tener un vino para ser un buen vino?

-Un buen vino debe ser un producto de una calidad asegurada, constante, que sea fácil de entender para todo el mundo y no solamente para los expertos y los aficionados. Y por supuesto, una relación calidad precio atractiva.

-¿Está reñida la calidad con el precio?

-No necesariamente, tenemos una suerte enorme, y sobre todo la generación más joven, y es que tiene la oferta de vinos más maravillosa, de mejor calidad y al mejor precio que ha habido en los 7000 años que dura la producción del vino en este planeta. Esta es la generación que más oportunidades tiene de tomar buen vino con precio razonable.

-¿En qué reside la elegancia del buen vino?

-Es difícil de definir, como cualquier elegancia, pero yo diría que el toque de un buen vino es aunar potencia y finura, cosas que parecen contradictorias. Un vino tenso y que nos da una sensación de ligereza cuando lo acercamos a la boca y a la nariz nos dé sensación de ligereza, de finura. Eso es difícil de conseguir, sólo lo tienen los grandes vinos del mundo.

-Ahora muchos jóvenes reniegan del vino y se decantan por otro tipo de bebidas alcohólicas, ¿qué consejos les daría para que se adentrasen en este mundo?

-Hay una encuesta reciente que afirma que un cincuenta por ciento no toma vino, y el otro cincuenta considera que es un producto de generaciones anteriores, de los abuelos, que no lo considera actual. Sí dicen que lo utilizarían antes que la cerveza en una cita romántica, y que nunca se emborracharían con vino, algo de lo que deberían tomar nota las autoridades. Uno de cada cuatro dice que se ha emborrachado últimamente, pero que utilizaría bebidas con mayor gradación alcohólica. Eso debería tenerlo en cuenta el Ministerio de Sanidad, que intentó hacer una Ley...

-¿Cómo es la cita romántica perfecta?

-Para una velada romántica, depende de dónde esté para elegir el vino, si estamos en la nieve o en la playa. Ahora que es verano, vamos a imaginar que es en una terraza del mediterráneo. Elegiría un vino blanco fresco o un buen rosado. También un tinto ligero fresco, pero nada de tintos de verano de estos que mezclan.

-¿Y para una cena con unos amigos, algo más distendido, qué vino elegiría?

-Ahí habría que ver los platos, mi propuesta serían muchas tapas distintas y cada una con un buen vino diferente. Con un blanco para comenzar, y luego iría subiendo de intensidad y de potencia hasta un gran vino tinto.

-¿Hay que tener un don, o es experiencia?

-Basta con coger una copa de vino y estar con una persona que te pueda instruir bien, no hace falta que sea un gran catador o hacer un curso formal. Hay una película, "Entre copas" , que refleja muy bien esto. Son dos amigos que se van a ver bodegas y uno que no sabe muy bien acaba sabiendo más que el otro.

-¿Se nota la crisis?

-Sí, pero yo diría que Iberwine Miami va a estar en cifras superiores que el año pasado.