MADRID, 22 Jun. (CHANCE) -
Los supuestos privilegios de Isabel Pantoja en la prisión de Alcalá de Guadaíra se están convirtiendo casi ya en un asunto de Estado. Era la semana pasada cuando saltaba la liebre tras la informaciones que Quique Alsedo daba en el diario El Mundo.
En el texto de dicho periódico, se podía leer como muchos funcionarios se han quejado del trato de favor hacia la tonadillera y de como su autoridad se veía mermada por culpa de la artista. Su abogado, Carlos Esteban Romero, en los momentos que salieron las informaciones, no dudó en negar tajantemente que su cliente tuviese privilegios.
Ahora, el letrado vuelve a hablar sobre estos rumores de los supuestos privilegios de Pantoja, los cuales no paran de crecer y crecer y de sumarse más y más funcionarios en contra de la directora de Alcalá de Guadaíra, la cual ha negado que la tonadillera estuviese como una reina en el centro penitenciario.
ISABEL PANTOJA ¿VÍCTIMA DE UNA VENDETTA?
"Mi cliente es la directamente perjudicada", afirmaba el abogado ya que si todos estos rumores infundados se tratase de una vendetta de algunos funcionarios contra la propia directora del centro penitenciario, sería algo espeluznante. "Siendo utilizada sin motivo porque mi cliente tiene un expediente inmaculado y así quiere seguir".
"Yo lo tengo que negar porque mi cliente me lo ha negado". Con el deber para con su cliente, el abogado no puede más que negar estos hechos.
En lo que respecta al dinero para pagar la multa que Isabel Pantoja tiene que hacer frente, el dinero parece que ya lo tiene y que no ha tenido que vender parte de su patrimonio para ello. Eso sí, el abogado se muestra más reservado sobre la procedencia del dinero.
"La procedencia de ese dinero se le comunicará a la audiencia nacional de Málaga por escrito y documentalmente justificado. De momento me tengo que acoger al secreto profesional porque no puedo decir de dónde se está reuniendo el dinero. Pero del que hay, evidentemente, estoy informado y se dará traslado a la autoridad judicial".
Finalmente, del tercer grado no sabe nada por el momento y ni le "consta que hayan empezado los trámites".