MADRID, 21 Jun. (CHANCE) -
La cantante Adele, una de las grandes ausentes del disco solidario de Simon Cowell, prefiere llevar iniciativas por sí misma. Si horas después del trágico incendio la artista se acercó hasta los aledaños para consolar a las víctimas, ahora quiere agradecer el enorme esfuerzo realizado por los servicios de urgencia que atendieron a las víctimas y trataron de aplacar el fuego.
La estrella musical visitó hace unas horas a un grupo de bomberos de la estación de Chelsea y no lo hizo con las manos vacías. "Ella acaba de llegar a la estación, llamó a la ventana y dijo que traía algunos pasteles para nosotros", comentó el portavoz de los bomberos, Ben King. "Así que le abrimos la puerta, se quitó las gafas y dijo: 'Hola, soy Adele", añadió.
La intérprete de Tottenham mantuvo una visita informal y cómoda sentándose para tomar una taza de té con los héroes y compartiendo un momento de silencio por las 79 víctimas que dejó este trágico suceso. Antes de irse, Adele no tuvo problema en fotografiarse con ellos y sonrió a las cámaras, fotografías que luego fueron compartidas por el bombero Rob Petty en su cuenta de Facebook.
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