La soprano reaparece en redes sociales para decir adiós con un desgarrador mensaje al año que termina y dar la bienvenida, con fuerza, valor y optimismo, a un 2022 que espera con los brazos abiertos
MADRID, 28 Dic. (CHANCE) -
2021 ha sido uno de los años más duros en la vida de Ainhoa Arteta. Desde su contagio por Covid que le provocó importantes problemas de movilidad, al cólico nefrítico que a punto estuvo de costarle la vida el pasado mes de julio, que ha paralizado su carrera y del que todavía arrastra secuelas - además de la pérdida de varias falanges de una de sus manos - hasta su inesperada y polémica separación de Matías Urrea, la soprano ha tenido que hacer frente en los últimos tiempos a terribles golpes que jamás hubiese imaginado.
Sin embargo, y lejos de tirar la toalla, la cantante continúa con su recuperación en su Donosti natal para reaparecer próximamente y, con un desgarrador mensaje en Instagram que refleja lo duro que ha sido este 2021, se ha sincerado con sus seguidores y ha revelado cómo afronta el año que está a punto de empezar y en el que, si algo tiene claro, es que "venceré".
"Adiós 2021. Por fin nos dices adiós. Me has cambiado la vida así de repente, sin esperarlo. Has puesto a prueba mi capacidad de aguante, mi resistencia. Has puesto mi vida al borde de un precipicio. Has probado mis fuerzas más allá de lo soportable. Me has hecho llorar de dolor, de rabia, de miedo, de vértigo" ha confesado Ainhoa Arteta en un montaje formado por imágenes de ella trepando una montaña - extraídas del programa de RTVE 'Cumbres' - con la ópera 'Vincèro', de Puccini, cantada por Luciano Pavarotti como banda sonora de este sincero balance de 2021.
Lejos de quedarse ahí, la soprano ha desvelado que en este año que termina "he conocido la traición, la decepción, la deslealtad, el miedo, la soledad". "He tenido que volver al punto de salida cargando mi, cada vez más, pesada mochila" ha admitido, asegurando que aunque el 2021 quiso derrotarla, "no me rendí".
"Entendí que el final de mi camino me estaba esperando más arriba, más lejos, más alto, y seguí creyendo, seguí luchando, seguí y seguí y seguí incansable día a día" ha desvelado, descubriendo cómo consiguió seguir adelante pese a lo duros que han sido los últimos meses: "Usé el silencio como escudo ante la ofensa, la profundidad de mis raíces para ser capaz de mirar muy alto, busqué mi fuerza interior para nadar contra corriente. Me levanté siempre después de cada tropiezo, de cada recaída, de cada decepción".
"2021 aquí estoy para tu sorpresa derrotándote yo a tí en tus últimas horas", ha añadido Ainhoa, que dando "la bienvenida a mi futuro" ha lanzado un potente mensaje de superación. "Sigo en marcha: llegaré a la meta, alcanzaré la cumbre. Mira lejos, muy lejos, mas lejos, venceré".
Para terminar esta amarga despedida al año más duro de su vida, Ainhoa ha dado una optimista bienvenida al 2022 que, está convencida, será el "año de la esperanza, de la ilusión, de la recuperación". Un canto a la vida y a la superación que demuestra que la soprano afronta el futuro con fuerza y muchas ganas de vivir y retomar su carrera profesional.