MADRID, 25 Jun. (CHANCE) -
Alejandra Rubio y Carlo Costanzia están de regreso en Madrid tras una semana alejados del foco mediático y de la expectación que ha desatado la noticia de su próxima paternidad. Un inesperado y sorprendente embarazo el de la hija de Terelu Campos tras apenas cinco meses de relación con el hijo de Mar Flores, que la pareja hacía público a golpe de exclusiva el pasado miércoles en portada de la revista '¡Hola!' y sobre el que parece que no tienen demasiadas ganas de hablar.
Después de unos días de relax y descanso navegando en un catamarán por aguas de Ibiza y Formentera, la televisiva y el actor ponían rumbo a Jávea para poner el broche de oro a sus vacaciones con unos amigos, y coger fuerzas para una vuelta a la rutina que promete ser del todo menos tranquila.
Este lunes la pareja llegaba a la capital y lo primero que hacían era desplazarse en un taxi a la casa de Terelu para recoger las llaves del piso de Alejandra, y sin ver a su madre -ya que fue su empleada del hogar la que se las bajó a la calle-, la influencer huía a las carreras al grito de "socorro" al ver a las cámaras.
Centrada en su embarazo, y para comprobar que su bebé está bien tras una semana lejos de Madrid, la nieta de María Teresa Campos ha madrugado y este martes, a primera hora de la mañana y sin la compañía de Carlo, ha acudido a una revisión en un conocido hospital de la capital.
Seria, cabizbaja y presumiendo de su incipiente barriguita con un top blanco con el que ha mostrado gran parte de su abdomen, Alejandra ha llegado al centro médico sin hacer declaraciones sobre cómo se encuentra, cómo se han tomado las críticas por su paternidad tras tan poco tiempo de relación, y qué le parece que su madre se haya sentado en el plató de '¡De viernes!' para hablar de su embarazo. ¡Dale al play y no te lo pierdas!
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