MADRID, 24 Abr. (CHANCE) -
Tras casi 20 años de matrimonio, la expareja de actores Melanie Griffith y Antonio Banderas han decidido poner en venta la mansión de Los Ángeles situada en la lujosa zona de Hancock Park, propiedad de ambos, cerrando así una puerta más a la escasa vinculación que queda entre ellos.
Después de un año de separación y de lucha de bienes, el exmatrimonio quiere deshacerse del que fue su hogar antes de su ruptura y presentar el divorcio en junio de 2014. La propiedad la adquirieron en 1990 por 4,2 millones de dólares y actualmente ha salido en venta por 16 millones de dólares.
Como describe la revista Vanidades, la vivienda posee 1.400 metros cuadrados y tres pisos en los que se distribuyen 13 habitaciones, 11 cuartos de baño, una biblioteca y cuatro chimeneas. Por no hablar del inmenso jardín con piscina y plantación de rosas.
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Aunque no es la primera vez que Griffith y Banderas se enfrentan por los fondos comunes, parece que va a ser una separación difícil para repartir una fortuna estimada en más de 37 millones de euros, según informa el diario El Mundo.
Pero el dinero y la grandiosa mansión no es lo único que les importa repartir a los actores, pues ya tuvieron un rifirrafe por los tres perros de la pareja, siendo Melanie quien puso un especial empeño en quedarse a cargo de los animales.
Sin embargo, la lucha por la custodia de la única hija que tienen en común no tuvo que ser sufrida porque Stella del Carmen cumplió la mayoría de edad pocos meses después de que sus padres se divorciaran, por lo que los progenitores pueden disfrutar de su hija a partes iguales. Aunque, el actor malagueño se sentía culpable por haberse distanciado de su hija debido a sus compromisos profesionales por lo que no dudó en dedicarle el Oscar que recibió el pasado mes de febrero a ella y pedirle perdón por sus ausencias.