Arantxa Sánchez Vicario y Josep Santacana, así afrontan la última y decisiva jornada de su juicio

   MADRID, 15 Sep. (CHANCE) -

   Quinta y última jornada del juicio por un presunto delito de alzamiento de bienes por el que Arantxa Sánchez Vicario y su exmarido, Josep Santacana, se enfrentan a una posible pena de prisión de cuatro años y a una multa que supera los 6 millones de euros acusados de ocultar y descapitalizar su patrimonio para no hacer frente a una deuda con el Banco de Luxemburgo de 7,4 millones de euros.

  Sus estrategias en este juicio decisivo para su futuro, muy diferentes. La extenista, que ha admitido su culpabilidad arrepentida y está pagando poco a poco la millonaria cantidad, habría ofrecido a la Fiscalía un pacto para evitar su entrada en la cárcel.

  Su estrategia de defensa, responsabilizar de todo a su marido, asegurando que como deportista de élite no entendía de dinero y propiedades y solo hizo lo que le aconsejó Santacana, que además de arruinarla la habría alejado de su familia. Así lo declaraba ante el juez entre lágrimas el lunes, único día que Arantxa acudió al Juzgado Penal número 25 de Barcelona.

   Su exmarido, en cambio, ha asistido al juicio a diario y, tranquilo, ha acusado a la extenista de hacer una 'puesta en escena' en su declaración. Tranquilo, ha asegurado que confía en demostrar su inocencia, asegurando que cuando conoció a su exmujer ya era insolvente, que la toma de decisiones pasaba por ella y que lo único que hizo fue intentar ayudarla.

  Dos posturas opuestas con las que Arantxa y Santacana han llegado este viernes a los Juzgados para estar presentes en la última sesión del juicio. La que fuera ganadora de Roland Garros, seria y acompañada por su abogado Borja Vives, ha evitado revelar cómo afronta este día tan decisivo: "Cuidado no os caigáis. Buenos días, gracias a todos por estar aquí. Como comprenderéis no puedo hacer ninguna declaración. Cualquier cosa se lo preguntáis a mi abogado. Gracias por estar aquí, vamos a esperar" ha expresado antes de entrar al tribunal.

  "Nervioso" ha llegado su exmarido, al que esta última jornada de su batalla judicial le toca declarar ante el juez. "No sé si es un día decisivo, pero al menos es el último" ha comentado, revelando que a pesar de todo afronta el trance "con tranquilidad" y asegurando que es "normal" que Arantxa se haya mostrado más serena hoy que el pasado lunes.