MADRID, 8 Ago. (CHANCE) -
Arantxa Sánchez Vicario está disfrutando de la calma después de la tormenta que ha supuesto su divorcio de Josep Santacana. La tenista ha abierto las puertas de su casa y de su corazón al periodista Lluís Canut en la segunda entrega de Quan s'apaguen els llums de TV3.
En este programa, Arantxa ha buceado en sus recuerdos más especiales, como fue su victoria contra Steffi Graf en la final de su primer Roland Garros: "Recuerdo que en ese partido me temblaba todo, especialmente en los últimos puntos. Cuando en el último, ella envió su revés en la red, rompí a llorar. Mi sueño se había hecho realidad".
Pero además, Arantxa ha querido explicar cómo ha sido el proceso de reconciliación con sus hermanos. Separados durante años por la mala relación que tenían con su marido, su separación de Santacana abrió las puertas a la reconciliación: "Yo di el primer paso para reconciliarme con mis hermanos. Les pedí perdón y lo aceptaron. Los necesitaba, especialmente a Emilio, que siempre ha estado a mi lado".
Una etapa muy dura en lo que lo más complicado para la tenista ha sido manejar el éxito repentino que obtuvo siendo muy joven: "Es muy difícil manejar el éxito, especialmente a los que nos llega tan jóvenes como fue en mi caso. No estás preparado para estas cosas. Cuando se nota más es cuando dejas de jugar".