MADRID, 1 Jul. (CHANCE) -
"Después de mucha reflexión y una cuidadosa consideración, hemos tomado la difícil decisión de divorciarnos. Seguimos adelante con el amor y la amistad el uno al otro y el compromiso de co-paternidad nuestros niños, cuya privacidad pedimos sea respetada durante este difícil momento. Este será nuestro único comentario al respecto, es un asunto familiar privado. Gracias por entenderlo". Así reza el comunicado con el que los actores Ben Affleck y Jennifer Garner anuncian su separación después de 10 años de matrimonio.
Los rumores de crisis matrimonial entre el oscarizado actor, director y productor de 42 años y su esposa, de 43, llevaban semanas siendo la comidilla de los mentideros de Hollywood. Con este comunicado a los medios se cierra una década de amor, que arrancó cuando se conocieron en 2003 durante el rodaje de Daredevil, y de la que han nacido tres niños, Violeta, Serafina y Samuel, cuya custodia compartirán ahora que cada uno inicia una nueva etapa por separado.
En una entrevista concedida a la revista InStyle el año pasado, la intérprete habló del matrimonio "consciente" de la pareja, y señaló que su relación ya no estaba en esa fase de "noviazgo", pero que estaba bien con él. "No se puede esperar a ser cortejada todo el tiempo, y no quiero tener que pelear en los tribunales, no tengo energías. Pero estamos, sin duda, siendo muy conscientes de donde estamos y haciendo un esfuerzo para estar juntos, hacemos las cosas junto, con amor", señalaba la estrella. Affleck, en muchas ocasiones, ha alabado lo mucho que Garner ayudó a estabilizar su vida después de convertirse en un habitual de los tabloides los años siguientes a su separación de Jennifer López en el año 2004.