MADRID, 3 Oct. (CHANCE) -
Ya han pasado casi dos meses desde que Jennifer Aniston y Justin Theroux se dieron el 'sí quiero' en una romántica e íntima ceremonia celebrada en su mansión de Bel Air.
Desde ese momento la vida de la pareja ha sido como un auténtico torbellino. Su luna de miel estuvo marcada por la trágica muerte de la asistenta de su amigo Joel Silver en la playa de Bora Bora justo a su vuelta a Los Ángeles. Pero todo ha quedado olvidado por la feliz noticia del embarazo de Jennifer.
Mientras Aniston disfruta de esta nueva etapa, su ex prepara el estreno de su nueva película La Gran Apuesta junto a Christian Bale y Ryan Gosling. El marido de Angelina Jolie ha sido uno de los progranistas colaterales del enlace de Aniston ya que varios medios estadounidense aseguraron que su regalo de boda había enfurecido al recién estrenado marido de la actriz.
El supuesto jarrón con girasoles que Brad habría enviado a su exmujer habría molestado mucho a Theroux, pero finalmente Gossip Cop ha desmentido esta información asegurando que el actor de regalo 12 años de esclavitud y Guerra Mundial Z nunca envió un regalo a su exmujer.
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