El atractivo joven, además, acaba de debutar como cantante de reggeaton
MADRID, 23 Sep. (CHANCE) -
Tras su incursión en el mundo de la interpretación con "Toy Boy" - cuya presencia está confirmada en la segunda temporada tras el éxito que ha alcanzado la serie en una conocida plataforma internacional - ahora Carlo Costanzia nos ha sorprendido con sus dotes musicales. Y es que el hijo mayor de Mar Flores ha debutado en el mundo de la canción con un tema de reggeaton, con el que ha cosechado buenas críticas. Disfrutando al máximo del tiempo libre, el joven demostró que está en una etapa muy dulce de su vida personal y presumió de nuevo amor por las calles de Madrid.
Lejos de esconderse, Carlo y su nueva y desconocida pareja pasearon bajo la luna como dos enamorados y es que intercambiaron besos, abrazos y muestras de complicidad durante todo el encuentro, como ya pudimos ver en las páginas de la revista "Diez minutos" la semana pasada. Sentada sobre su regazo en uno de los bancos de la vía pública, la joven que acompañó al actor estuvo muy pendiente de su teléfono móvil en todo momento.
Intentando desligarse de los apellidos que le acompañan, Carlo ha vuelto a sorprendernos esta vez en el terreno musical y es que se ha lanzado con el reggaetón con su tema ‘XXX’ cuya letra la generado mucha polémica por frases como: “Ella quiere que la apriete mientras mueve ese filete” o “a ese culo yo le rezo”.
Sin duda alguna, el hijo de Mar Flores ha demostrado ser un joven con las ideas muy claras y es que siempre ha luchado por hacerse un hueco en el mundo de la interpretación, y ahora en la música, sin utilizar sus apellidos. El joven, que se formó en la academia de Juan Codina, es fruto de la relación que la modelo tuvo con el empresario Carlo Costanzia.
Ahora, y fruto de su duro trabajo, Carlo triunfa en televisión, en el mundo de la música y, como os mostramos en estas fotografías, en el amor, con una desconocida y atractiva morena con la que, lejos de esconderse, presume de complicidad y arrumacos por el centro de la capital.