MADRID, 4 Mar. (CHANCE) -
Con motivo del Día de la Mujer el próximo 8 de marzo hemos querido traer a nuestras páginas a Carmen San Martín, actual y primera mujer que preside la Denominación de Origen Rueda.
El poder de la mujer en el sector vinícola es cada vez mayor, en un mundo que ha sido considerado durante muchos años 'de hombres', las mujeres han ido copando los puestos de máxima relevancia. Especialmente en el caso de la D.O. Rueda cada vez nos encontramos con más enólogas, sumilleres, técnicas y dueñas de bodegas.
Este 2020 es un año especial para la Denominación de Origen Rueda ya que cumple su 40 aniversario siendo la D.O. más antigua de Castilla y León. Son 70 bodegas las que componen la D.O. Rueda y sus 3.000 familias llevan 10 siglos elaborando vino.
Como dato del último informe realizado por la consultora AC Nielsen, es la D.O. con mayor tasa de conversión a nivel nacional, más de la mitad de los que lo prueban se convierten en consumidores habituales, consolidando su liderazgo como 'el blanco' más consumido, más recomendado y el preferido entre los consumidores.
Actualmente, Rueda triunfa en el sector más joven y el femenino. Su público no son los tradicionales consumidores de vino y están dirigiendo todos sus esfuerzos en acercarse al público joven, haciendo hincapié en que no hace falta ser experto, ni tener grandes conocimientos para disfrutar de un buen vino y ofreciéndoles vinos fáciles de beber y de acompañar con cualquier maridaje. De esta forma lo que quieren es formar parte de su vida para que les tengan en cuenta como una opción dentro de sus hábitos de consumo.
Carmen San Martín vallisoletana de pro, a sus 41 años cuenta con una larga trayectoria. Licenciada en Derecho por la Universidad de Valladolid,cuenta también con un máster en Asesoría Jurídica de Empresas por el Instituto de Empresa en Madrid (2005) y un máster en Dirección y Gestión de Empresas Vitivinícolas, en la Cámara de Comercio de Valladolid (2010-2011).
Comenzó su carrera profesional trabajando en banca hasta que en junio 2012 se incorporó a la bodega familiar. Mujer, joven, empresaria, apasionada del vino, desde finales de 2017 es la presidenta de la D.O. Rueda.
P: Cómo presidenta de la D.O. Rueda, ¿cuáles son sus funciones?
CS: Se trata de un órgano colegiado, con lo que todas las decisiones se han de tomar por el acuerdo de los 12 vocales que lo componen. Por lo que, las funciones del presidente son labores de representación: fijar el orden del día y la convocatoria de los Plenos y por supuesto velar por el cumplimiento de los acuerdos adoptados en los mismos.
P: ¿Se siente una mujer empoderada? ¿Cómo valoraría este término?
CS: Cada día intento crecer, en primer lugar, como persona y después como profesional, admitiendo mis debilidades, y tratando de convertirlas en fortalezas. Creo que lo importante, es ir superando temores y dificultades poco a poco.
P: ¿Le ha supuesto una dificultad abrirse camino dentro de la industria del vino como mujer?
CS: En mi caso tengo que decir que no, quizás he sido una privilegiada, pero desde un primer momento se me dio la oportunidad de asumir un puesto de responsabilidad, por lo que las dificultades que he ido viviendo son las propias del trabajo dentro de una empresa familiar, así como las propias del cargo que ocupo dentro de la Denominación, pero en ningún caso distintas por ser mujer.