MADRID, 30 Jul. (CHANCE) -
Tras sentarse el pasado sábado en la silla del Deluxe, Chelo García Cortés ha vuelto hoy al plató de Sálvame después de su paso por Supervivientes, volviendo a verse cara a cara con compañeros como Kiko Hernández, Mila Ximénez y María Patiño.
Chelo ha llegado al plató sin aplausos y completamente vacío, mientras Paz Padilla le daba la bienvenida a "un programa de mierda", como definió Marta Roca al programa en su última entrevista a una conocida revista. Al primero al que se ha encontrado la periodista ha sido a Kiko Hernández, con quien se ha dado dos besos y repasado su paso por Honduras.
Kiko le ha asegurado que "has sido una decepción y has hecho un concurso de mierda". Chelo ha aprovechado para defender que no le ha pedido dinero a Begoña de el bingo Las Vegas, sino que fue para intentar conseguir un alquiler más barato para su estancia en Madrid, además también ha querido aclarar que no puede vender su casa para saldar las deudas que tiene pendiente.
Después ha llegado María Patiño, a la que ha vuelto a pedir perdón y con la que ha firmado la paz después de cargar contra ella y Gema López desde la isla.
Pero la guerra llegaba al plató con Mila Ximénez. La colaboradora cargaba contra ella y Marta de la forma más dura: "Es una sin vergüenza, una mantenida y has vendido a tu madre y a tu pareja por dinero", cargaba la periodista ante una Chelo completamente derrumbada y derrotada en su regreso. Mila ha continuando haciéndose grande y ha machacado a su compañera hasta el extremo.
Tras la publicidad y ya en un tema diferente, Chelo ha abandonado el plató llorando. Mila ha salido detrás asegurando que era por algo positivo y es que al mirarse no han podido evitar emocionarse. Al final ambas se han dado un emotivo abrazo que ha terminado con las lágrimas de Chelo, que asegura que esto no le compensa y no puede más.