MADRID, 21 Sep. (CHANCE) -
Dos páginas son las que dedica el diario ABC a la queridísima Concha Velasco. La actriz ya ha confesado que se encuentra estupendamente de la enfermedad pero las secuelas, como el pronunciado cansancio, siguen ahí. "Estoy viva y me siento querida", es sin duda la frase que resume el estado en el que la propia Concha Velasco se encuentra.
El trabajo es una de sus prioridades, pues ante todo ella quiere seguir estando activa y haciendo lo que mejor sabe hacer, actuar. Sin embargo, tras varias operaciones a las que se ha sometido, que sí peritonitis, vesícula y el linfoma, está claro que el cansancio hacen mella. Pero es la mirada de Concha Velasco como bien explica ABC, donde podemos ver el optimismo de la actriz y lo que le ayuda a seguir día a día tan fresca como una rosa.
Y es que asegura que la peor con diferencia fue la de peritonitis en la que en propias palabras de la actriz "estuve a punto de morirme". Eso sí, logró recuperarse a pesar de las posteriores operaciones a las que tuvo que pasar.
"Tengo que se ser ejemplo de alegría", afirmaba la actriz para el diario y por eso, no pierde la sonrisa. La actriz se tendrá que seguir sometiendo a revisiones y analíticas mensuales hasta el mes de enero, pero no es ha menguado su sonrisa. Muy bien cuidada por su familia y por sus compañeros de profesión, asegura que la tristeza no se encuentra por ahora entre sus sentimientos predilectos.
Para Concha Velasco, la enfermedad realmente le ha cambiado la vida y la manera de verla: "Me han cambiado las prioridades. Yo soy más cigarra que hormiga, soy de las de 'carpe diem'... Y me he dado cuenta de que eso es muy bonito para decirlo como frase, pero que hay que cuidar no solamente los bienes materiales para no terminar en la calle, si no que hay que cuidar la salud", palabras que leemos en ABC.
Y en cuanto a salud por ahora dicen que le han recomendado no tomar medicamentos: "Me han prohibido tomar ningún medicamento. Se me están rompiendo las uñas, y ahora sí que se me está cayendo el pelo, porque no puedo tomar ninguna pastilla hasta el día 29. Ni aspirinas. Creo que la preocupación la estoy llevando a un límite excesivo. Pero yo me automedicaba mucho, y eso se acabó", explica la actriz.
Confiesa que la religión le ha ayudado mucho y que se santigua siempre cuando entra en casa, pensaba que era mas optimista pero cuando le dijeron que tenia que pasar por el quirófano tuvo fe en ello y pudo someterse a las operaciones sin problema.
Concha Velasco volverá a los escenarios el dia 26 de septiembre en Zaragoza, con la obra Olivia y Eugenio. Una obra en la que interpreta a una mujer con cáncer terminal y un hijo con Síndrome de Down. Un papel difícil pero del que ha podido superar las dificultades.