MADRID, 2 Jun. (CHANCE) -
Después de 48 goles en liga, siendo el jugador más goleador de la temporada y de jugar la semifinal de la Champions con el Real Madrid, las vacaciones de Cristiano Ronaldo eran más que merecidas.
Tras el fin de la temporada de fútbol, el portugués ha decidido escaparse unos días a Saint - Jean - Cap - Ferrat, en plena costa azul, en un paradisiaco enclave entre Niza y Mónaco.
En el lujo yate del dueño de Topshop, disfrutando con sus amigos con los que ha compartido risas y chapuzones, Ronaldo ha presumido de cuerpo y ha inaugurado así el primer baño de la temporada estival. Sin querer ni oir hablar de romances y noviazgos, tras su ruptura con Irina y la relación que ha empezado esta con el actor Bradley Cooper, Cristiano prefiere la compañía de sus amigos para relajarse y disfrutar del sol y el mar.