Daniel Day-Lewis conquista a sus compañeras de 'Nine'

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   LOS ÁNGELES, 26 Nov. (EUROPA PRESS)

   Penélope Cruz, Fergie, Kate Hudson, Nicole Kidman... todas ellas tienen algo en común: han caído rendidas ante Daniel Day-Lewis. El actor parece tomarse muy en serio su papel de conquistador en Nine, y va dejando notas amorosas y románticas a las actrices que interpretan a sus amantes.

   A Daniel Day-Lewis le fabricaron material de papelería con el nombre de su personaje en Nine, Guido Contini, que él utilizó para enviar cartas de amor a Fergie y Kate Hudson, dos de las actrices que interpretan a sus amantes en la película. Las dos afirman que Day-Lewis sigue metido en su personaje aún fuera del rodaje, y lo utiliza para comunicarse con ellas.

   Parece que ambas están encantadas con la manera en que Day-Lewis se prepara sus papeles, pues según declara Fergie a la publicación Wenn, "eran (notas) bonitas, preciosas". Por su parte, Kate Hudson asegura: "me escribió: 'El número estuvo genial. Con amor, Guido'. Es un gran recuerdo, todavía lo conservo".

   Quien también participa en el rodaje de 'Nine' es Sophia Loren, y también dice estar muy contenta con Day-Lewis. Aunque no interpreta a una amante de Guido, sino a su madre, las maneras del actor han conquistado también a la septuagenaria actriz. "Es muy peculiar y le quiero mucho", ha declarado sobre él.

   La que ya iba predispuesta a adorar a Day-Lewis es Penélope Cruz, quien también ha caído rendida ante el actor pese a no haber recibido cartas de amor. La protagonista de Volver asegura que se sentía muy nerviosa ante el hecho de conocer en persona a Day-Lewis. "Es uno de mis actores favoritos. He oído un montón de historias sobre cómo trabaja pero traté de ignorarlas y comprobarlo por mí misma", ha reconocido.

   Y, mientras que para unas supone un gran estímulo la manera de trabajar con Day-Lewis, a otras les transmite tranquilidad. Nicole Kidman, que interpreta a la musa de Guido Contini, afirma que "cuando rodábamos nuestras escenas juntos apenas hablábamos. Nos sentábamos juntos en una pequeña habitación y me sentía lo bastante cómoda para echarme una siesta a su lado".