Daniel Sancho, primeras declaraciones tras asesinar y descuartizar a Edwin Arrieta: “Soy culpable, pero yo era su rehén”

   MADRID, 6 Ago. (CHANCE) -

   Tras ser detenido en Tailandia acusado de asesinato, Daniel Sancho ha declarado haber cometido el atroz crimen: "Soy culpable, pero yo era el rehén de Edwin. Me tenía como rehén. Era una jaula de cristal, pero era una jaula". Con estas palabras confesaba ser el autor de la muerte de Edwin Arrieta Arteaga, cirujano plástico de 44 años de origen colombiano.

   El joven de 29 años ha asegurado en un testimonio a EFE frente a sus abogadas de oficio tailandesas y varios agentes que me hizo destruir la relación con mi novia, me ha obligado a hacer cosas que nunca hubiera hecho". Por el momento, el hijo mayor del actor Rodolfo Sancho sigue detenido en la comisaría de policía de Koh Phangan.

   Además, asegura que el colombiano estaba obsesionado con él: Me engañó, me hizo creer que lo que quería era hacer negocios conmigo, meter dinero en la empresa de la que soy socio. Que hiciéramos cosas juntos, que fuéramos a México, Chile, Colombia, a abrir un restaurante. Pero era todo mentira. Lo único que quería era a mí, que fuera su novio".

   Daniel Sancho llegó a la isla de Phangan el 1 de agosto, lugar donde se encontró con la víctima, cuyo cuerpo fue hallado días después desmembrado en un vertedero de Tailandia. El joven asegura que la relación que se sentía amenazado por él, algo que le llevó a cometer el crimen: "Cada vez que intentaba alejarme de él, me amenazaba"

   Sobre la presión de los agentes tailandeses para declarar su culpabilidad, Daniel asegura que lo hizo por decisión propia: "No me sentí cómodo, pero tampoco forzado". Confiesa que "nadie me ha pegado ni me ha hecho daño y que sintió que no tenía otra opción en el momento: Me tomaron pruebas de ADN y eso es todo. Eso es todo".

   Durante estos días, los agentes locales intentan reconstruir el crimen con la ayuda de Daniel Sancho, a quien han llevado hasta la playa donde estuvo con el doctor colombiano antes de su desaparición. Se espera que su padre, Rodolfo Sancho, aterrice en la isla los próximos días.