MADRID, 13 Jul. (CHANCE) -
La aparición de Cheryl Cole el pasado día 8 de julio en la presentación en Manchester de las audiciones de la nueva temporada de The X Factor ha creado cierta alarma entre sus seguidores.
La extrema delgadez de la que hace gala la estrella musical británica provocó una oleada de comentarios en distintos medios de comunicación, como el Daily Mail, y en programas como Loose Women (ITV), donde alertaban sobre el aspecto físico de la cantante, calificándolo de “vergonzosamente delgada”. “Tiene la responsabilidad de controlar ese físico por respeto a sus fans más jóvenes. Así parece un tía anoréxica”, decía una de las colaboradoras del espacio.
No es la primera vez que la intérprete de éxitos musicales, como Fight For This Love y Crazy Stupid Love, aparece con un aspecto bastante cambiado, siendo ya habitual en ella las oscilaciones de peso desde que en 2010 enfermara de malaria en un viaje a Sudáfrica, que la tuvo tres semanas ingresada.
Estos comentarios sobre su alarmante aspecto físico coinciden con el primer aniversario de su matrimonio con Jean-Bernard Fernández Versini y su regreso como jurado del talent show de Fremantale Media, después de un año ausente. Además, Cole, de 32 años, compartirá mesa con Rita Ora, con la que tuvo sus más y sus menos hace tres años por el tema Call My Name, y con Nick Grimshaw, los encargados de sustituir las bajas de Louis Walsh y a Mel B. Unas audiciones que tuvieron que ser aplazadas por la muerte de la madre del cuarto coach y productor ejecutivo del concurso musical, Simon Cowell.