MADRID, 13 Feb. (CHANCE) -
Aunque no se dejó ver en la alfombra azul de los Goya en el Palacio de Congresos y Exposiciones FIBES de Sevilla, Victoria Federica no se perdió la gran noche del cine español y se convirtió, con su impactante look, en una de las grandes protagonistas de una de las exclusivas fiestas privadas posteriores a la entrega de los 'cabezones'.
Un sarao organizado por el marido de Paz Vega, Orson Salazar, en el que la hija de la Infanta Elena, confirmando que es una de las influencers más populares del momento, dejó a más de uno boquiabierto con su look dramático firmado por Fernando Claro Couture; un vestido negro estilo años 20 con encaje, plumas, brillos y transparencias que combinó con bolso al tono de Dior, maquillaje marcado y el pelo recogido en una coleta tirante que destacaba sus facciones.
Una noche muy especial en la que Victoria, acompañada por su mejor amiga Rocío Laffon, se codeó con otros rostros conocidos como José Mari Manzanares, Álvaro Morte, Juana Acosta, Javier Calvo, Manuel Díaz 'El Cordobés', Virginia Troconis o Macarena Gómez, y en la que por unas horas consiguió evadirse de la última polémica protagonizada por su hermano Froilán, que horas antes abandonaba España rumbo a Abu Dabi tras ser desalojado de un after ilegal a las 9 de la mañana hace una semana.
Tras disfrutar como nunca de los Goya, la hija de la Infanta Elena regresaba a Madrid este domingo sin contar ningún detalle de cómo lo pasó en su 'debut' en la gran noche del cine español. Esquiva, protegida por un amigo que ejerció de 'guardaespaldas' - interponiéndose entre las cámaras y ella - con gafas de sol y unos maxi auriculares para no escuchar a los reporteros, Victoria se comportó como una celebrity americana ignorando las preguntas y huyendo molesta de la estación del AVE. Una actitud poco cercana con la que ha dejado claro que no piensa pronunciarse sobre la marcha de España de su hermano. ¡El momento, en el siguiente vídeo!
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