MADRID, 30 May. (CHANCE) -
John Galliano ha vuelto al mundo de la moda buscando el perdón del pueblo judío. El diseñador ofreció un seminario de moda y religión en una sinagoga de Londres.
Allí confesó ante la audiencia que le esperaba: "Soy un alcohólico, y de ninguna manera lo pongo como excusa. Solía culpas a los demás de lo que me sucedía pero ahora asumo la responsabilidad", escribe Brenda Otero en El País.
El modisto ha hecho frente al rechazo generado por sus polémicos insultos antisemitas que le valieron la expulsión de Dior y la condena de la justicia francesa. Ahora, se define como un hombre nuevo que busca volver al selecto club de las altas esferas de la moda. Entre los que han tendido una mano a Galliano se encuentra el popular rabino Barry Marcus.
Él mismo fue el encargado de defender este seminario ante aquellos que querían boicotearlo: "Aquí tenemos a un valiente que se ha dedica a un periodo de reflexión". El rabino instruyó al gibraltareño en el Holocausto y le animó a meditar por lo que había hecho.