MADRID 2 Feb. (OTR/PRESS - Ruth Fernández) -
Genoveva Casanova ha hablado por fin del secreto que tan celosamente ha guardado: su relación con Gonzalo Vargas Llosa. La pareja no ha desvelado su noviazgo hasta que no han estado seguros de sus sentimientos y el momento ha llegado. La chispa entre los dos surgió hace tres años en un viaje humanitario organizado por ACNUR.
Genoveva y Gonzalo se han estado viendo desde hace tres años, pero no querían adelantarse a tomar una decisión hasta que estuvieran un poco más seguros de lo querían. Las fotos de la modelo junto a la familia del escritor en Estocolmo, en la entrega del Nobel, terminó de confirmar lo que era un hecho, su relación es más que sólida.
Se conocieron gracias al ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados), en un viaje de trabajo que hizo Genoveva a Nueva York. Allí fueron presentados y desde entonces no han dejado de verse. Además, la pareja ha conseguido superar el problema de la distancia y han mantenido vivo el cariño.
La misma Genoveva explica para ¡Hola! que el estar separados es un obstáculo, pero que todo se puede cuando hay ganas. Ella vive a caballo entre México y Madrid, y él, entre Nueva York y la República Dominicana. Además, el hijo de Mario Vargas Llosa ahora pasa más tiempo fuera porque está encargado de la oficina de Haití.
De momento no se han planteado trasladarse a algún lugar para estar juntos. Tampoco hablan de futuro, pues prefieren vivir el presente. Y si por algo se caracteriza su relación es por avanzar con pasos firmes. Además, Genoveva es consciente de que sus hijos son españoles y de que su vida gira en torno a ellos.
También debe ocuparse de su madre en México, quien se recupera lentamente del ictus cerebral que sufrió el abril pasado, y de su trabajo como diseñadora, modelo y cronista de viajes. Pero lo que Genoveva tiene claro es que su relación va muy bien y que Gonzalo le ha ayudado una barbaridad.