MADRID, 29 Nov. (CHANCE) -
Bárbara Rey reaparecía este jueves ante los medios como imagen de un conocido restaurante italiano de Madrid tras la polémica que ha habido en los últimos días por una supuesta operación estética que se habría realizado como consecuencia del deterioro físico que habría tenido este último año por lo mal que se lo ha hecho pasar su hijo.
Sin embargo, nos encontramos con una mujer que aseguraba no haberse realizado ninguna intervención quirúrgica, simplemente un pequeño retoque para quitarse la grasa que le sobraba del cuello.
Además, dejó claro que sí es cierto que lo ha pasado muy mal este último año, pero que desde hace unos meses había decidido vivir tranquila y rodeada de las personas que sí quieren estar a su lado.
En cuanto a su hijo, aseguró que no cierra la puerta a ninguna reconciliación y que las Navidades las pasaría en Marbella junto a su hija Sofía y la pareja de esta, como ha venido haciendo en los últimos.
Ángel ha reaparecido este viernes ante las cámaras tras estas declaraciones y... ¡ni se inmuta! al decirle las palabras que había tenido su madre en la tarde de ayer, ha preferido guardar silencio.
Y es que su actitud llama la atención ya que no hace ningún gesto ni expresa su opinión al decirle que su madre no cierra la puerta a una reconciliación y se limita a afirmar que su mujer "está súper bien, hasta luego".