MADRID, 10 Abr. (CHANCE) -
Las cosas se le complican muy mucho a Oscar Pistorius durante el juicio celebrado en Pretoria (Sudáfrica), en el que se sienta como acusado de haber asesinado de manera intencionada a la que fuera su novia, la modelo Reeva Steenkamp. El juicio, que se está alargando más de lo que se tenía previsto, ha llegado a uno de los momentos culmen, el interrogatorio por parte de la defensa y de la acusación a Oscar Pistorius.
Mientras que la defensa del atleta intentaba mostrar una imagen no tan cruda del deportista, el fiscal ha podido empeorarla gracias a la presión que ha ejercido con Oscar. Gerrie Nel ha sido el fiscal encargado de lograr frases que pueden sorprender a más de uno durante el turno de su interrogatorio este pasado miércoles. Y es que si Oscar Pistorius llegó incluso a vomitar cuando el forense relataba la autopsia que se le hizo a la modelo asesinada, en esta ocasión se ha visto forzado a que viese las imágenes de cómo quedó la cabeza de la modelo, envuelta en sangre. Fue el propio fiscal quién le enseñaba las instantáneas de cómo quedó el cráneo de la modelo, haciendo que el juicio se tomase un receso para volver a continuar.
"PUDE SENTIR SU SANGRE CORRIENDO SOBRE MÍ"
Sangre que según ha explicado el propio Oscar Pistorius durante el juicio que pudo sentir en su propia piel después de que descubriera que había disparado a su novia. Fue cuando el atleta rompió la puerta del baño, para descubrir el cadáver de Reeva, lugar donde la modelo se había encerrado para protegerse de Oscar, cuando quiso comprobar si aún respiraba.
"Me arrodillé junto a Reeva, para ver si respiraba. Su cabeza descansaba sobre mi hombro y pude sentir su sangre corriendo sobre mí", comentaba de manera escalofriante el deportista el instante que descubrió el cuerpo ensangrentado y sin vida de la señorita Steempkamp.
"Cometí un error. Sí, disparé a Reeva Steenkamp y la maté. No tuve la intención de matar a Reeva, ni a ninguna otra persona", calificaba Oscar Pistorius el terrible incidente además de excusarse por el terrible suceso, ante la presión ejercida por el fiscal Gerrie Nel. "¿Cometió un error? Usted mató a una persona es lo que hizo. Le disparó y la mató, ¿no asumirá la responsabilidad de esto?" De esta manera le recriminaba el fiscal a Oscar Pistorius los hechos acontecidos aquel fatídico 14 de febrero del pasado año.
"¡Diga sí, yo disparé y maté a Reeva!" exclamaba el fiscal además de seguir reprochándole que debía "aceptar la responsabilidad de lo que había hecho", cosa que finalmente hizo Pistorius ante la jueza Thokozile Masipa.
"¿VE EL IMPACTO DE ESTA MUNICIÓN EN LA SANDÍA? EXPLOTÓ, ¿NO ES ASÍ? ¿SABE QUE ES LO MISMO QUE LE PASÓ A LA CABEZA DE REEVA?"
Con la introducción de estas duras palabras, el fiscal Gerrie Nel quiso mostrar en el juicio unos vídeos donde se puede ver a Oscar Pistorius manipulando armas e incluso disparando en un campo de tiro, donde disparaba con el arma que causaba la muerte a la modelo. Gracias a Sky News, se pueden ver dichos vídeos, donde en uno de ellos se puede ver como el atleta reventaba una sandía de ahí la frase que exponía el fiscal: "¿Ve el impacto de esta munición en la sandía? Explotó, ¿no es así? ¿Sabe que es lo mismo que le pasó a la cabeza de Reeva?"
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Unas imágenes que vuelven a reafirmar la obsesión de Pistorius por las armas de fuego, las cuales ya causaron un pequeño incidente en un restaurante cuando uno de los amigos del atleta le dejó al mismo un arma en un restaurante y esta se disparó por accidente. Incluso la propia arma que tenía Pistorius la dejaba en la mesilla mientras dormía.
Este ha sido el interrogatorio más duro al que se ha tenido que enfrentar el atleta, el cual ya ha pedido disculpas a la familia de la modelo. Sin embargo, el perdón puede que no le libre de la cadena perpetua a la que se enfrenta el deportista si finalmente es declarado culpable de haber asesinado a Reeva de manera intencionada.
La serie de testigos que ya han declarado en el juicio no se lo han puesto fácil pues hay vecinos que aseguran que escucharon gritos escalofriantes procedentes de la casa de Pistorius y Reeva el día del incidente.