MADRID, 21 Nov. (CHANCE) -
Dejando claro que no quiere tener ningún tipo de relación con sus hijos, Isabel Pantoja ha cambiado su testamento para que el día que fallezca no les quede a Kiko Rivera y a Isa Pantoja más que la herencia legítima que marca la ley.
Como desvela la revista 'Semana', la tonadillera habría nombrado heredero universal a su hermano Agustín Pantoja, y querría deshacerse de todo su patrimonio a excepción de su casa de El Rocío, puesto que su deseo sería que sus restos mortales reposen en un azulejo de la Virgen del Rocío que tiene en su propiedad del pueblo almonteño.
Un sorprendente e inesperado movimiento de la cantante sobre el que sus hijos no se han pronunciado por el momento, pero al que sí ha reaccionado Irene Rosales. "Todos los días algo nuevo. Pero no voy a hablar de nada" ha asegurado con gesto de cansancio, superada por la gran cantidad de polémicas e informaciones que implican a Kiko Rivera y a su familia y sobre las que, una vez más, se ha desmarcado tajante.
Tras la interrupción de una vecina que ha defendido que el Dj y la sevillana son "un matrimonio ideal" asegurando que "Kiko se ha llevado a uno y han traído a otro, es el gran poder. Y ella es un fenómeno", Irene tampoco se ha pronunciado sobre la dura entrevista de Diego Gómez tachando de interesada y calculadora a Isabel Pantoja. Y aunque ha confirmado que "claro que conozco a Diego" aunque no conocía a Kiko cuando el malagueño fue pareja de su suegra, ha preferido no comentar qué le han parecido sus declaraciones.
Una decisión de mantenerse al margen de las polémicas de la familia Pantoja que ha reafirmado cuando le hemos preguntado si Kiko continúa pensando en tender la mano a Isa y tener un acercamiento con su hermana después de que la peruana haya anunciado que está embarazada de su segundo hijo. "Yo ya no entro en más nada" ha sentenciado tras confirmar hace unos días que apoyará a su marido si quiere reconciliarse con la hija de la tonadillera. ¡Dale al play y no te lo pierdas!