MADRID, 27 Oct. (CHANCE) -
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Irene Rosales no está atravesando un momento fácil. La mujer de Kiko Rivera ha tenido que lidiar durante estos días con las informaciones que apuntan a que su marido le había sido infiel.
En su sexto mes de embarazo, la joven sevillana trata de mantener la calma y hacer oídos sordos a todo lo que se está hablando acerca del famoso vídeo del Dj. Aunque él ya abandonó este jueves la casa de Gran Hermano Revolution, la tormenta mediática no ha dejado de cebarse con ellos.
En declaraciones exclusivas a Europa Press, Irene apunta a que sea como sea, los únicos que tienen que hablar son ella y su marido: "Sea verdad o mentira es algo de mi intimidad y solo tengo que hablarlo con él".
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Una situación complicada para ambos que ven como su estabilidad se tambalea a raíz de las últimas informaciones aparecidas en Sálvame.