MADRID, 11 Dic. (CHANCE) -
Sin duda, si ha habido una presa que ha captado todas las atenciones mediáticas es Isabel Pantoja. La popular tonadillera está a punto de disfrutar de su ansiado tercer grado y por ende salir de la prisión de Alcalá de Guadaíra en la que ha estado cumpliendo condena durante más de un año.
Un año donde su vida ha cambiado radicalmente, sobre todo en el terreno familiar. Ahora que las mieles de la libertad están a la vuelta de la esquina, toca hacer balance de su paso por la cárcel. Ni Farruqito, ni José Ortega Cano e incluso Mayte Zaldívar o en menor medida Julián Muñoz han acaparado tantas polémicas como la cantante de Se me enamora el alma.
Que si el tercer grado, que si los permisos, que si el ingreso en el hospital o los supuestos tratos de favor. Fue quizá esta información la que hizo que el ojo público mirara con muchísima lupa cada paso que daba la tonadillera tanto dentro como fuera del centro penitenciario.
Sin embargo, antes de llegar a los supuestos tratos de favor, la controversia daba comienzo con una supuesta agresión a la cantante. Muchos se especuló con que las presas de Alcalá de Guadaíra no habían recibido con mucho agrado a la cantante, aunque también se habló de que había fans de la misma que le harían de la vida algo más fácil. El caso es que Instituciones Penitenciarias tuvo que salir a desmentir que Isabel Pantoja no había sido agredida y que su integridad en la cárcel estaba asegurada.
Tras esto y unos continuos Vis a Vis con los diversos miembros de la familia que iban y venían con un trajín de asuntos personales, llegaron los supuestos tratos de favor. El pistoletazo de salida quizá lo daba la preferencia en el economato de prisión, llevado por una supuesta prima de Raquel Bollo que también se encontraba en prisión.
DE SER "MUY SENCILLA Y NOBLE" A SER 'LA BICHO'
Pero lo que realmente alertó a todos los medios fue la publicación de una noticia en el diario El Mundo que denunciaba los supuestos tratos de favor a la cantante por parte de la directiva del centr. "Los funcionarios de la prisión de Pantoja se rebelan por sus privilegios", era aquel titular que daba la vuelta por media España. A partir de entonces, se convertiría en la pesadilla de la propia cantante y también de su abogado e incluso de la directora de Alcalá de Guadaíra.
De un momento a otro, aquella mujer "Muy sencilla y muy noble" como bien calificaba una presa pasaba a ser 'la bicho' por parte de algunas de sus compañeras reclusas que también salieron al trapo para acusar a la artista de estos supuestos tratos de favor. Un calvario que la familia y el propio abogado intentó por todos los medios negar en rotundidad.
Tratos que no se demostraron y que se cobró como víctimas dos presas que firmaron la carta denunciando privilegios hacia la cantante y que fueron sancionadas por parte incluso del Ministerio del Interior, encargado de hasta hacer una investigación para esclarecer los hechos demandados.
UN LARGO INGRESO EN EL HOSPITAL, OTRA DE LAS POLÉMICAS
En el apogeo de estas acusaciones, llegó el ingreso de la tonadillera en el Hospital Infanta Luisa de más de 20 días. Durante su estancia en este centro médico privado, se le diagnosticó nefropatía dibetica la cual no se regulaba debido a que Isabel Pantoja no seguía a raja tabla las directrices de los médicos.
Mucho también daba de qué hablar dicha estancia en el hospital pues, el que hubiese escogido un centro privado y no público, hacía sospechar a más de uno que todo esto habría sido una artimaña de la tonadillera para que el tiempo pasase y así poder apañar el tercer grado. Finalmente, este capítulo se cerraba con una salida exprés del centro hacia la prisión, sin testimonios visuales.
JULIÁN MUÑOZ PEDÍA DISCULPAS, ISABEL PANTOJA LAS PIDIÓ... ¿PERO SE PERDIERON?
Mientras que a todos nos sorprendía las disculpas públicas en una de las últimas apariciones de Julián Muñoz en los juzgados, pidiendo perdón a todo el pueblo de Marbella, a Isabel también se le exigía lo mismo. O bueno eso es lo que se pensaba pues existía una carta donde la cantante sí que pedía disculpas pero que se perdió y que los medios se hicieron eco pero nadie había visto. En definitiva, que la controversia estaba servida en bandeja de nuevo. El que esta carta no apareciese donde pedía disculpas fue uno de los argumentos usados para denegarle el tercer grado, donde se aseguraba que Pantoja no se arrepentía de haberse llevado ingentes cantidades de euros.
La aparición de la madre biológica de su hija adoptiva, Chabelita y un sin fin más de problemáticas han acechado a la cantante. Como decíamos, ni Farruquito y todo lo que se lió, Ortega Cano y sus polémicos juicios o Mayte Zaldívar han tenido tanta serie de catastróficas desdichas dentro de su estancia en prisión... ¿Qué tendrá Isabel Pantoja?