MADRID, 20 May. (CHANCE) -
Hace 45 años que aterrizó en nuestro país, y desde que lo hiciese Isabel Preysler se convirtió en uno de los personajes más queridos y carismáticos de la prensa rosa. Ahora, y cumpliendo este aniversario la filipina se ha querido sincerar en una entrevista de lo más inesperada en el número de junio de Vanity Fair.
Isabel ha desvelado detalles inéditos de sus matrimonios con Julio Iglesias, Carlos Falcó y Miguel Boyer, los hombres de su vida al que se suman sus hijos Enrique y Julio. De sus hijas Chabeli, Tamara y Ana, a las que está muy unida, también ha hablado. Los buenos y los malos momentos de la vida de Isabel se resumen en esta entrevista.
"JULIO NO ERA FIEL, PERO ME ADORABA"
La reina de corazones no ha dudado en desvelar uno de los momentos más agridulces de su vida cuando se casó con Julio Iglesias y por primera confiesa ella misma que se casó embarazada aunque siempre se dijo que su hija Chabeli había sido sietemesina: "Podría decir que nos casamos porque estábamos enamorados y sería verdad, pero lo cierto es que me quedé embarazada. Entonces parecía una tragedia no pasar por vicaría. El cura que nos casó a Julio y a mí, el 20 de enero de 1971, declaró que nunca había visto a una novia llorar tanto en su vida, estar tan, tan triste. Simplemente sentía que no era el momento todavía. [...]"
La mujer más admirada por todos porque se había casado con uno de los ídolos de masas de esa generación no ha tenido problema en hablar y alto y claro de las infidelidades de Julio y de la mentalidad quizá, de las madres de aquella época (el asentir que una mujer debe aguantar las infidelidades": "Y después fui muy feliz, porque Julio se comportó de forma adorable conmigo hasta el final. Las cosas se pusieron más tensas cuando le pedí el divorcio... [...] Mami no podía entender que me separara de un señor que me amaba tanto, porque claro, Julio no era fiel, pero me adoraba”.
Entre los más duros, la dama de la alta sociedad ha hablado por primera vez de lo duro que fue la pérdida de tres de sus cinco hermanos, "éramos seis hermanos y tres de ellos ya han fallecido. En 2011 murió mi hermana Beatriz de un cáncer de pulmón. Carlos falleció víctima de otro cáncer en 2013. Y Enrique se fue a los 25 años, en 1971. Pensé que mi madre no se iba a recuperar nunca". Otro de esos duros momentos y que han hecho que se tome la vida más en serio fue el ictus que sufrió su actual marido Miguel Boyer, del cuál dice que fue un amor a primera vista, "no fue culpa de Carlos, fue mía, qué quieres que te diga. Lo sentí muchísimo por él, pero me enamoré". Es verdad que me fascinó Miguel. Era muy brillante, tenía mucho sentido del humor. Pero también es una persona seria y me dijo que para él esta relación era muy importante y no para que me divirtiese y lo pasase bien".
SU GRAN ENFADO CON LA NIETÍSIMA: "SOY RENCOROSA. PERO CUANDO ALGO ME LLEGA AL ALMA..."
Si algo tiene esta mujer es que cierra filas ante los suyos y sus hijos son lo más importante para ella. Amiguísima de Carmen Martínez-Bordiú tras la separación de ambas, -ella de Julio y Carmen del duque de Cádiz compartieron salidas y entradas y grandes fiestas- pero hubo un gesto que Isabel no perdonó. La Bordiú acudía al primer programa que inventó la fórmula que siguieron Salsa Rosa, Donde estás corazón, Sálvame Deluxe...Tómbola, donde ridiculizaron un poco a Chabeli y esta no la defendió. Impresionante revelación cuando asegura que eso le dolió muchísimo: "Me escribió una carta cariñosa y me llamó [...] Yo me disgusté mucho y me llegó al alma. Fue muy tonto por mi parte, pero yo soy así, soy rencorosa. Me gustaría no serlo (ríe), pero cuando algo me llega al alma... [...] La invité a la boda de Chábeli y vino. No tocamos ni el tema. Y ahora seguimos como siempre”.
Reflexiones sin duda, de una mujer que siempre ha mantenido el misterio y que parte de ese misterio es lo que ha creado ese aura en torno a ella: “Mi matrimonio con Carlos (en 1980) fue totalmente opuesto al de Julio. Carlos es un hombre muy cosmopolita, al que le gusta mucho viajar, moverse, el campo... [...] Era liberal de verdad, yo podía ir a fiestas, bailar y divertirme... Julio más bien era un chico de derechas, conservador, celoso y posesivo". Y muy natural explica que su fracaso con el padre de Tamara Falcó fue por ella: "No fue culpa de Carlos, fue mía, qué quieres que te diga. Lo sentí muchísimo por él, pero me enamoré".
MIGUEL BOYER QUIEN LE PUSO LOS PUNTOS SOBRE LAS ÍES
Y de quien se enamoró fue de otra persona completamente diferente a lo que había vivido, Miguel Boyer. Una relación que sorprendió a propio y extraños ya que no se entendía que una de las manos de hierro de la etapa de Felipe González, saliera con la dama de corazones. ¿Que pasaría con esa relación? ¿Habría perdido la cabeza Miguel Boyer? ¿O sería el que la hiciera sentar la cabeza? Pues ocurrió justo eso, el político siguió siendo en su seriedad y que acabó como empresario, sin que años después le haya pasado factura su relación. Y tal y como cuenta la de Filipinas en VF le dijo: "Esta relación era muy importante y no para que me divirtiese y lo pasase bien. [...] Miguel me hizo pensar que la vida era más seria de lo que yo creía. A menudo le he tenido que decir: ‘Oye, Miguel, también la parte frívola de la vida es importante, ¿eh?".
Esta entrevista en exclusiva no deja indiferente ni a sus hijos. Isabel comenta por primera vez que sus hijos Julio y Enrique durante un tiempo estuvieron enfrentados por su carrera profesional. "A Julio lo que le molestó fue que Enrique empezara en su profesión y lo mantuviese en secreto. Su pique empezó entonces por ahí".