MADRID, 30 Sep. (CHANCE) -
Kiko Matamoros se ha convertido en el protagonista indiscutible de Sálvame. Sus líos familiares, sobre todo con su hijo Diego Matamoros en los platós está siendo la comidilla de todos sus compañeros. El integrante del 'eje del mal' del programa que triunfa por las tardes en Telecinco se ha encontrado con un panorama familiar que sin duda, no se esperaba.
Era en el día de ayer, cuando Kiko Matamoros se quedaba atónito y mudo cuando su hija Laura Matamoros entraba en directo al programa para asegurar una información que venía manejando Belén Esteban. Al parecer, la hija de Kiko se había marchado de la casa de su padre porque este la habría echado al no defender a Makoke, la actual pareja de Kiko y la que parece que será su futura mujer.
La situación se ha vuelto mucho más cruda tras el polígrafo sin censura al que se sometía Diego Matamoros el pasado viernes, que dejó en muy buen lugar a su padre y sobre todo, demostró la inquina que tiene Diego hacia Makoke. Una situación que ha hecho que Kiko Matamoros esté de lo más apagado, sin esa vigorosidad que ha demostrado antaño.
Sus inicios en Crónicas Marcianas junto a su hermano Coto Matamoros eran de aúpa. En aquel programa, los dos hermanos sin duda eran un auténtico terremoto televisivo de agarrarse a la mesa. Durante esta etapa vimos a un Kiko enérgico, sin miedo, para nada comedido. Tras Crónicas Marcianas en el programa de Javier Sardá, comenzó el enfrentamiento entre los dos hermanos.
Un auténtico choque de trenes donde ambos vivieron acalorados enfrentamientos en diversos programas como el extinto DEC. Impávido, Kiko Matamoros supo como defenderse de los ataques de Coto casi sin inmutarse, pero parece que cada encontronazo ha ido haciendo mella en el colaborador de Sálvame.
Ya en el programa de Telecinco, su ímpetu ha ido descendiendo, incluso mostrándonos su lado más humano. A pesar de no dejar de cargar contra muchos de los personajes que han pasado por la silla de al lado de Jorge Javier Vázquez, Kiko ha ido desinflándose hasta verse superado por su situación actual y todo lo que está viviendo en el programa junto a sus compañeros, esos que no dejan títere con cabeza cada vez que tratan temas personales de cada integrante del programa.
De ser sin duda todo un terremoto a pasar a un temblor de baja intensidad.