MADRID, 27 Ene. (CHANCE) -
El pasado siempre vuelve. Esta frase debe sonar más que nunca en la cabeza de Kiko Matamoros. El matrimonio del colaborador de Sálvame con Marian Flores se ha convertido en el tema del momento, a raíz de la entrada de su hija Laura en Gran Hermano VIP.
Mucho se ha hablado de cómo fue esta relación de diecisiete años que dejó cuatro hijos en común y un mar de infidelidades. Matamoros ha decidido dar su versión de los hechos en SEMANA donde comienza así el primer capítulo de sus memorias: "Mi vida con Marian".
Kiko cuenta que compartía piso con el primer marido de Marian, José Javier. "La vi de paso un día que fui con mi compañero de piso a recoger su ropa, en plena separación. Yo me estaba lavando y salía del baño cuando la vi mirarme y me hizo gracia. Pero la ex de mi amigo... Y ahí se quedó la cosa", escribe.
Un primer encuentro que tuvo su segunda oportunidad en Becerril de la Sierra cuando coincidieron en el bar del pueblo. Desde ese momento, comenzaron a salir. En septiembre de 1979 empezaron a vivir juntos tras sufrir un aparatoso accidente de tráfico en Galicia ese verano.
KIKO MATAMOROS: "AL NACER DIEGO, ME HICE UNA SUITE Y ME TRASLADÉ ALLÍ PARA PODER DORMIR"
Siete años de convivencia que terminaron en matrimonio. "Lo hicimos por diferentes motivos cada uno de nosotros y después de haber vivido una gran crisis de pareja de la que solo se salía dando un paso adelante o dejándolo...", explica Kiko.
De la fecha de esta boda civil en 1984 Matamoros no tiene recuerdo pero sí de la fiesta de despedida: "Hice la fiesta con mis amigos en el chalet de mis padres en la sierra y el ágape con familias e invitados lo pagó mi padre, en unos salones del Hotel Eurobuilding". En 1985 llegó su hija Lucía y al poco Diego: "Las noches eran horrorosas, no había forma de dormir y era una, otra, otra; y yo me instalé en la planta de arriba del dúplex para poder descansar. Me tenía que levantar a las ocho de la mañana con los ojos como una gamba y era imposible para mí. Al nacer Diego, me hice una suite y me trasladé allí para poder dormir, donde luego me subía a alguno de los niños ya dormidos".
Unos años difíciles para Matamoros: "Esos primeros años recuerdo no tener una gran vinculación emocional con mis hijos. Por el modelo paterno que, aunque rechaza, acabé reproduciendo".
KIKO MATAMOROS RECONOCE QUE FUE INFIEL EN SU MATRIMONIO CON MARIAN
La relación con Marian se empezó a enfriar y llegaron los affaire de Matamoros: "Después de nuestra primera crisis seria, en mi relación con Marian empezaron mis infidelidades [...] No me siento culpable, porque no considero que le fallara a Marian, sino que me fallé a mí y a mis hijos", para terminar de afirmar: "Psicológicamente estaba enchufado a mis hijos y mantenía ese matrimonio por ellos".
Unas infidelidades que según Kiko no tenían importancia para su esposa: "En mi opinión a ella no le importaba demasiado". Tras unos años separado, en 1992 se trasladó de nuevo a Madrid para darle una segunda oportunidad a su matrimonio: "Volví para recuperar a mis hijos, les echaba mucho de menos".
Otra etapa matrimonial que terminó el 5 de septiembre de 1998, fecha en la que Kiko le comunicó a Marian en su propio coche que lo suyo había terminado: "Lloramos los dos, al separarnos. Tuvimos una conversación serena, dolorosa. Pienso que Marian no se acaba de creer que yo me fuera a ir de casa. Le pedí que me ayudara con los niños. Lloramos mucho los dos".