MADRID, 15 Feb. (EDIZIONES/CHANCE) -
Anoche Londres reunía a los actores y actrices más internacionales en la gala de los premios BAFTA. La noche del cine británico coincidía con San Valentín y el presentador de la gala, Stephen Fry, no quiso perder la oportunidad de poner románticos a los asistentes.
Para subir la temperatura utilizaron una de las tradiciones más divertidas de Estados Unidos: la cámara del beso.
Cuando la cámara enfoco a la pareja de moda, Alicia Vikander y Michael Fassbender se vivió uno de los momentos más incómodos de la gala, que la cadena de televisión BBC decidió no emitir.
Ambos actores son tan celosos con su vida privada que no quisieron participar en el juego y se negaron a besarse delante de todas las cámaras, por ahora no han hecho ninguna muestra de su amor en público.
Para suerte de Stephen Fry el resto de estrellas que allí se encontraban si quisieron participar como fueron Leonardo DiCaprio y Maggie Smith, que cuando la cámara del beso les enfoco el actor sorprendió a las actriz de 81 años dándole un beso muy cariñoso por detrás. El momento no tiene desperdicio ninguno.
Quienes protagonizaron otro de los mejores momentos del juego fueron Julian Moore y Bryan Cranston, que simularon un beso de tornillo de lo más apasionada, causando la risa de todos sus compañeros.