MADRID, 24 May. (CHANCE) -
Lara Dibildos es una mujer comprometida con la igualdad y la justicia social. Pese a que sólo han pasado tres meses desde que la actriz puso fin definitivamente a su romance con Joaquín Capel, afirma que mantienen una buena relación.
Pero es que lo cierto es que mantiene una buena relación con la mayoría de sus ex, como los padres de sus dos hijos, Fran, fruto de su matrimonio con Fran Cuesta, y Álvaro, nacido de su relación con Álvaro Muñoz Escassi.
Centrada en la obra de teatro Diez negritos y en su faceta como madre, Lara Dibildos sigue abierta al amor, aunque reconoce que con los años se ha vuelto más exigente.
CH: Las actrices si soléis quejaros de que a partir de cierta edad no hay papeles para mujeres...
L.D.: Una actriz conocidísima hizo un discurso en los Goya hablando de esto. Los hombres maduros con canas son muy atractivos y están en su mejor momento y a nosotras nos cuesta encontrar esos papeles maravillosos. Todavía no he llegado a esa edad pero me estoy acercando peligrosamente (ríe).
LARA DIBILDOS: "ESTOY HACIENDO AHORA MISMO UN PERSONAJE QUE YA NO ES LA JOVENCITA O LA RUBIA TONTA PORQUE YA NO TENGO LA EDAD"
CH: De momento en cuanto a trabajo no te puedes quejar, estás en el teatro con Diez negritos...
L.D.: Estoy haciendo ahora mismo un personaje que ya no es la jovencita o la rubia tonta porque ya no tengo la edad. He tenido la suerte de encontrar un personaje que es una mujer que le está costando aceptar su edad y que ya no tiene el atractivo que tenía antes.
CH: ¿Cómo llevas lo de cumplir años?
L.D.: Celebrándolo con tarta, con velas y con amigos, cumplir años significa que es un año más que estoy aquí. Si me dijeses que puedo tener la experiencia que tengo ahora pero con un físico de veinticinco, diría que sí (ríe). Eso es imposible y prefiero quedarme como estoy.
CH: Además de la obra de teatro, ¿tienes algún otro proyecto?
L.D.: Sí, pero todavía no está firmado. Es en España, podría irme en cualquier momento a Estados Unidos pero mientras tenga trabajo en España estaré aquí con mis hijos. Prefiero quedarme aquí porque estuve separada de ellos y fue algo muy duro, aunque a nivel profesional fue maravilloso.
CH: ¿Has dejado allí proyectos?
L.D.: Sí, claro. Casi me vine cuando empezaba a tener muchas puertas abiertas, pero tuve que sopesar entre mi vida personal y profesional. Las mujeres en casi todos los casos elegimos nuestra vida personal que son nuestros hijos.
CH: ¿Notas que en la interpretación se te ha mirado más con lupa por tus padres?
L.D.: Sí, pero alguna cosa buena tiene la edad. Con la edad que tengo ya no pienso en que soy hija de. Después de diecisiete años haciendo teatro si siguiese pensando en que es porque me apellido de una forma, tendría un problema.
CH: La edad también le hace a una saber lo que quiere en el amor y lo que no...
L.D.: Con la edad una se hace más exigente en el amor y por eso estoy soltera (ríe). Tienes las cosas más claras de lo que quieres y de lo que no, por eso soy más exigente. No me embarco en una relación si no veo las cosas claras, cuando eres joven sí te lanzas.
CH: ¿Es exigencia o pereza?
L.D.: Es experiencia, sabes que hay ciertas cosas que no funcionan porque después no eres feliz. Cuando eres joven te lanzas por la inconsciencia, cuando eres más mayor y lo has vivido no tiene sentido liarla parda si sabes que no va a funcionar. No es lo mismo que cuando vas sola en el barco, ahora llevas un pack maravilloso que son tus hijos.
"AHORA NO BUSCO NADA, PORQUE CUANDO BUSCAS TE VA FATAL EN LA VIDA"
CH: ¿Qué buscas ahora en una relación?
L.D.: No busco nada, porque cuando buscas te va fatal en la vida. Ahora mismo tengo la vida con mis hijos, mi trabajo, mi padre y mis planes. Tengo mi vida muy hecha pero si apareciese alguien que sumara le abriría la puerta. Mientras no aparezca ese algo evidente prefiero seguir como soy.
CH: Algunos de tus ex forman parte de grupo de amigos, ¿Cómo se consigue llevarse bien con un ex?
L.D.: Porque cuando no me he llevado bien no lo he contado (ríe). Con el tiempo todo se relaja y todo pasa. También depende de cómo rompas una relación. Cuando rompí con Joaquín fue una ruptura de mutuo acuerdo en la que dos pensábamos igual, por eso ahora somos amigos.
CH: ¿Qué te parece que Álvaro Muñoz Escassi haya rehecho su vida?
L.D.: No sé si la he rehecho, no tengo ni idea. He visto lo mismo que todos, una foto en el tenis. Con él no tengo ese tipo de conversaciones, tenemos conversaciones sobre nuestro hijo. Es una decisión suya, espero que él sea feliz y que cuando elija tener una persona a su lado mi hijo forme parte de la vida de ellos.
CH: ¿Cómo llevas vivir lejos de tu hijo mayor, de Fran?
L.D.: Mal, además este año es complicado porque con el teatro los fines de semana tengo más trabajo y él tiene los partidos. Tenemos puentes y acueductos en España en los que de vez en cuando ha podido venir y lo he podido ver.
CH: ¿Te ves los partidos para decirle en qué falla?
L.D.: ¿Yo? No (ríe), para eso está su padre. Si se dedicase al teatro ya le diría yo algo, este marrón es para el padre.
CH: ¿Te hubiese gustado que se dedicase al teatro?
L.D.: No lo sé, quiero que sean feliz, que estén bien y que hagan lo que les gusta.
CH: ¿A ti te han visto actuar?
L.D.: Sí, a los dos les encanta el teatro porque desde pequeños los he estado llevando. Les gusta como espectadores, aunque el pequeño aún no se sabe.
"MI MADRE ES UNA SÚPER ABUELA. EL SARGENTO DE CABALLERÍA QUE TUVE YO COMO MADRE HA DESAPARECIDO"
CH: ¿Cómo está tu madre?
L.D.: Mi madre está muy bien, es una súper abuela que los consiente un montón. El sargento de caballería que tuve yo como madre ha desaparecido (ríe).
CH: Ahora que se van haciendo mayores, ¿No te entra la morriña de tener un bebé por casa?
L.D.: Qué va, ahora que he pasado todos los biberones y las papillas y que son algo más independientes no. Estoy fenomenal así.