MADRID, 18 Ago. (CHANCE) -
Lola Herrera es una de las actrices más veteranas de nuestro país y a sus 80 años sigue estando al pie del cañón ya sea en cine, teatro o televisión. La artista regresa al teatro junto a Héctor Alterio que juntos representarán en el Teatro de Bellas Artes la obra El estanque dorado, a partir del próximo martes 18 de agosto.
Se trata de dos grandes de la escena de la interpretación que coinciden una vez más para representar este texto de Ernest Thompson, bajo la dirección de Magüi Mira y coprotagonizada por Luz Valdenebro, Camino Rodríguez y Mariano Estudillo.
A Lola le hubiera gustado compartir su vida con una persona, como el argumento que se desarrolla en esta obra, pero como no ha podido ser disfruta de su soledad: "Yo la pareja la necesitaba cuando era más joven. Ahora ya no. Yo hubiera sido la mujer más feliz del mundo si desde joven hubiera hecho un recorrido con esa persona pasando por todo. No ha podido ser así, no me voy a tirar de los pelos".
Sin embargo, la actriz se siente muy feliz con su trabajo imparable, el cuál le aporta muchas cosas en la vida. "Me ayuda mucho a llenar mi vida, trabajo porque me apetece mucho trabajar y bueno indudablemente porque me viene muy bien para tener un nivel de vida. Indudablemente de las jubilaciones no se puede vivir igual que hemos vivido en el resto de nuestra vida".
Pero además, la veterana actriz disfruta de la interpretación junto a su hija, con la que disfruta trabajando y asegura que "es mejor" que ella. "Yo la veía allí como el personaje, aunque sea una cara conocida. Hombre el día del estreno igual sí que tienes tus nervios y los de tu hijo. Pero una vez pasado eso, no te causa miedo, mi hija es mejor que yo. Sabes que se saben desenvolver muy bien en su trabajo".
CHANCE: Es una obra que habla mucho de la tercera edad, yo me sorprendí el otro día cuando me enteré que habías cumplido 80 años, ¿qué hay que hacer?
LOLA HERRERA: Bueno pues tener buena genética, y mis padres ya se murieron así que ya llegas tarde.
CH: ¿De dónde sacas esa energía?
L.H: Soy así. será la genética, he hecho una vida sana pero también fui una niña de post guerra. No sé porque soy así pero es la manera de funcionar que tengo y tengo mucha energía, aunque ya he perdido mucha.
CH: Decía Héctor que lo que le empuja es porque si te jubilas te queda muy poco dinero
L.H: A mí me alimenta la profesión. Héctor tiene una vida muy completa con una mujer maravillosa. Yo mi trabajo me ayuda mucho a llenar mi vida, trabajo porque me apetece mucho trabajar y bueno indudablemente porque me viene muy bien para tener un nivel de vida. Indudablemente de las jubilaciones no se puede vivir igual que hemos vivido en el resto de nuestra vida.
CH: ¿Te has puesto una meta?
L.H: No, nunca me he puesto metas en la vida para nada. Voy haciendo y la meta te la da la vida. En el momento que no pueda hacer lo que quiera hacer ese es el momento de quedarme sentada en una silla. Mientras que para mi sea una cosa importante que me ayude a vivir no lo voy a dejar.
CH: ¿Tienes proyectos también para salir en televisión?
L.H: Sí, esta mañana estaba grabando para televisión. 'Amar es para siempre', también he grabado una historia muy bonita y bueno hacemos lo que podemos.
CH: ¿Un orgullo volver a Madrid con los tiempos que corren?
L.H: Muchísimo. La obra ha sido una bomba en todos los sitios y el público se engancha muy bien a la obra al principio. Yo creo que el autor hizo una pieza con unos ingredientes que te permiten contar lo que es la familia y las edades. Todo eso es con una carcajada y está envuelto en un humor negro maravilloso.
CH: ¿Hay algo a lo que tú le tengas miedo?
L.H: No, bueno siempre se tiene miedo a cosas. Pero no a la muerte, le tengo el respeto debido. Pero vamos que sé que me tengo que morir, aquí no me voy a quedar.
CH: ¿En Amar es para siempre qué papel hace?
L.H: Pues hago el papel de una enfermera que llega y tiene una historia, pero eso no te lo puedo contar
CH: ¿Se enamora de ella un hombre?
L.H: Bueno, eso no te lo puedo contar.
CH: ¿Lo otro es una mini serie?
L.H: No es una miniserie, es un solo capítulo.
CH: ¿Cuál es el secreto para tener esa complicidad con Héctor?
L.H: No hay secretos. Es que coincida o no coincida que eso surja o no. En este caso ha surgido, hay un feeling estupendo y trabajamos muy a gusto. Es como si me hubiera tocado un premio maravilloso. Es encontrarse en el escenario con él con su generosidad y su saber hacer y es maravilloso.
CH: Él dice que cuando trabaja con sus hijos lo pasa muy mal porque tiene muchos nervios, ¿a ti te pasa lo mismo?
L.H: Pues no. No hemos trabajado mucho juntas, pero hicimos 'solas' o alguna cosa más que es poco para tantos años. Lo que hemos hecho yo la veía allí como el personaje, aunqeu sea una cara conocida. Hombre el día del estreno igual sí que tienes tus nervios y los de tu hijo. Pero una vez pasado eso, no te causa miedo, mi hija es mejor que yo. Sabes que se saben desenvolver muy bien en su trabajo
CH: ¿Te cuesta más ser critica con Natalia por ser tu hija?
L.H: No, no me cuesta. Yo salgo de la familia para hablar de las cosas. En casa se habla muy claro siempre y lo que no estamos de acuerdo lo decimos y así nos ayudamos. Lo de poner una capa rosa a todo y aquí no pasa nada es una manera de crear una cloaca.
CH: Hablabas de héctor y su mujer, pero tú no has llenado tu vida porque no has querido
"AHORA LO QUE SE PUEDE TENER ES AMIGOS, CONFIDENTES Y PERSONAS CON LAS QUE PUEDAS COMPARTIR COSAS Y VIAJES"
L.H: Pero que bien, yo la pareja la necesitaba cuando era más joven. Ahora ya no. Yo hubiera sido la mujer más feliz del mundo si desde joven hubiera hecho un recorrido con esa persona pasando por todo. No ha podido ser así, no me voy a tirar de los pelos.
CH: ¿No te volverías a enamorar?
L.H: Pero qué dices, tengo ochenta años, tu te crees que me voy a meter en esos líos. Qué pereza. Ahora lo que se puede tener es amigos, confidentes y personas con las que puedas compartir cosas y viajes, pero dentro de la amistad, de la fraternidad, de la lealtad... bueno yo pienso eso, habrá gente que piense otra cosa. Yo llevo sola muchos años y ha aparecido gente en mi vida pero no me ha interesado lo suficiente para que yo prescindiese de mi soledad.