MADRID, 21 Oct. (CHANCE) -
Anoche Lolita Flores se sentaba en el plató de Sábado Deluxe después de convertirse en abuela el pasado 12 de octubre del pequeño Noah, el hijo de Elena Furiase y Gonzalo Sierra.
La artista ha visto hacerse realidad uno de sus grandes sueños, el de ser abuela, y por eso no ha dudado en presumir con Jorge Javier Vázquez de la nueva etapa que esta viviendo y como su hija está afrontando la maternidad.
Con el humor que le caracteriza Lolita desvelaba que "yo siempre le digo que yo soy la abuela gitana y la negra y la otra es la abuela rubia", haciendo referencia a su consuegra. Pero sin duda el momento más emotivo para Lolita fue cuando cogió a su nieto por primera vez en brazos y todavía se emociona al recordarlo, aunque bromea al respecto: "Mi consuegra y yo entramos en el paritorio porque nos dejó el doctor. Cuando entramos este le dijo a Elena que le diese al niño y ella respondió con un 'no' rotundo", así que la propia Lolita tuvo que intervenir: "le tuve que gritar de lejos que se lo dejase que era para que los viésemos nosotras".
En cuanto a como ve a su hija como madre confiesa: "Va a ser muy como nosotras, muy de lo suyo", y asegura que "va a ser muy buena madre, se maneja muy bien", por lo que Lolita no ha tenido que estar encima de su hija en todo momento demostrando que no son una familia al uso, aunque desvela que tienen un chat familiar en el que Elena cuenta "si ha comido y que la tiene frita porque no le coge la teta izquierda".
Pero las palabras más bonitas de la actriz llegan cuando habla de sus dos hijos y es que asegura que está muy orgullosa del amor que existe entre los hermanos y contaba al presentador: "Guillermo a veces me dice que cree que quiere más a su hermana que a mí. A mí eso no me parece mal, y yo creo que Elena lo mismo". Además, ha aprovechado para dar las gracias por las muestras de cariño recibido en estas últimas semanas y por cuidar de sus hijos de los que añade: "Son los dos artistas pero son niños normales, solo quieren ser felices", zanja.