MADRID, 15 Sep. (CHANCE) -
María Escario ha acudido a la entrega de los premios de periodismo Concha García Campoy celebrado en el Círculo de Bellas Artes de Madrid.
Como no podía ser de otra manera, ha recordado la memoria de su compañera y amiga alegando que "no está, pero sigue muy presente". De ella ha destacado "su generosidad y su talento para ser una periodista todoterreno". "Es un referente para todas porque era una gran amiga y una gran confidente. Yo, cuando tenía un problema, a la primera persona que llamaba era a Concha porque ella siempre te daba una visión de sentido común, de coherencia. Era una persona con una sensatez enorme", explicaba y añadió: "Sigue muy presente. En algunas cenas que hacemos a veces dejamos una silla y un plato para ella".
CHANCE: cuéntanos que ha sido para ti poder hacer estos premios
María Escario: Bueno, triste entrecomillas porque estos premios nunca hubiera querido que se crearan ni ser jurado ni nada, porque lo que hubiera querido es tener a Concha con nosotros. Dicho esto, y puesto que ya es un hecho y concha se nos fue en 2013, estoy contenta porque hemos sido muy fieles a lo que a ella le hubiera gustado, a su espíritu, y queremos seguir esa senda, ese legado de generosidad, de criterio, de talento, todo eso que tenía Concha, trasladarlo a estos premios y que crezcan como creció ella profesionalmente.
CH: ¿Qué debemos recordar de concha en un día como hoy?
M.E.: Yo creo que su generosidad y su talento para ser una periodista todoterreno. Concha dentro de su belleza maravillosa, física e interior, era una mujer que sabía ser inteligente y que su belleza nunca la utilizó para conseguir llegar más alto o más lejos. Lo que primaba en Concha era su inteligencia, luego resulta que además era un ser bello y hermosos. Eso es lo más importante y es su gran legado.
CH: ¿Os seguís juntados las brujillas?
M.E.: Sí, seguimos teniendo el chat. Concha no está pero está y sigue muy presente y de hecho en algunas cenas que hacemos a veces dejamos una silla y un plato para ella. O sea que muchas veces Concha está y de hecho está en nuestras conversaciones, está en todo. Es un referente para todas porque era una gran amiga y una gran confidente. cuando yo, particularmente, cuando tenía un problema a la primera persona que llamaba Era a Concha porque ella siempre te daba una visión de sentido común, de coherencia. Era una persona con una sensatez enorme.
CH: ¿Y ahora cuando te ha pasado algo así cómo haces? Porque la echarás de menos, ese primer impulso de llamarla.
M.E.: Pienso qué haría ella. Muchas veces lo he pensado en momentos personales o profesionales donde ella siempre sabía ser una persona medida, media muy bien las cosas. Intento pensar que me diría ella y qué cosas haría ella.
CH: Lorenzo ha seguido sus pasos. ¿Se la ve reflejada en sus hijos, tienen mucho de ella?
M.E.: Tienen todo de ella. Berta de una manera, Lorenzo de otra. Lorenzo es fantástico que siga su senda como periodista, apunta buenas maneras no, lo siguiente; y tiene una cosa muy buena que es la sensatez. Es muy jovencito todavía, tiene 23 años pero es tremendamente sensato. Es verdad que la vida le ha dado un golpe tremendo, ha tenido que asumir un papel como cabeza de familia pero tiene una madurez brutal para afrontar las cosas y los problemas y eso lo aprendió de su madre. Y yo creo que también concha les preparó muy bien para lo que podía pasar
CH: Has destacado de ella que también fue un gran ejemplo de lucha contra la enfermedad
M.E.: Por supuesto, pero también un gran ejemplo de forma de vivir. De lucha contra la enfermedad porque todos lo hemos vivido, pero cómo afrontar un desenlace trágico y hasta en eso era previsora y hasta en eso preparó a su entorno, especialmente a sus hijos, porque podía pasar. Ninguno lo que queríamos y ella pensaba que iba a vivir, pero yo creo que hasta en eso fue previsora.
CH: A Lorenzo se le ve buena persona, ¿estaría orgullosa Concha de sus hijos?
M.E.: Estaba muy orgullosa de los dos. Son muchos distintos Berta y Lorenzo, pero se adoran mutuamente y han recibido un palo gordísimo y la forma tan madura de afrontar las cosas es porque tenían esa madre tan potente y te transmitía unos mensajes que te dejaban es su obra, es su gran legado. Berta y Lorenzo serán gente muy valiosa porque son muy buena gente y porque han heredado lo mejor de un ser excepcional como era Concha.